El Sindicato Administrativo de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, UASLP, debe pensar la serie de afectaraciones que podría estar acarreando a la vida académica de 30 mil estudiantes, antes de llevar a cabo el estallamiento a huelga que tienen contemplado para el próximo 9 de noviembre, según consideró el rector, Alejandro Javier Zermeño Guerra.
Los más de mil 300 trabajadores de la máxima casa de estudios que pertenecen a áreas de intendencia y administrativos, están peleando alrededor de 7.5 millones de pesos que presuntamente se les adeuda de una prestación acordada como pago de tres días de salario base y que ganaron en la administración de Manuel Fermín Villar Rubio en 2020.
Gerardo Rivera Müller, líder gremial de los trabajadores ha mencionado que no desistirán en la lucha por este pago y menos, después de haber sido reelecto como secretario general de los trabajadores administrativos, hace apenas unos días. Ante esta defensa de sus derechos laborales, el jefe de la comuna iniversitaria, les pide que deduzcan las posibles afectaciones que provocarán con esta intención de provocar la huelga.
“Una consecuencia muy grande es que los estudiantes podrían perder su semestre, podrían dejarse de graduar un mundo cercano a dos mil estudiantes, podrían dejarse de titular y con esto perder oportunidades laborales, dejarían de recibir el sueldo por problemas administrativos más de 4 mil trabajadores universitarios, entre ellos, los mismos del Sindicato Administrativo, pero también afectaría al Sindicato Académico, porque ello, estamos en la posibilidad de seguir laborando”.