La facilidad de llegada a contenidos afines, así como la posibilidad de ver en televisión la programación de la app han impulsado a esta aplicación.
Expansión.- Luz María Vázquez, de 69 años, tiene una rutina muy establecida en su semana. Como jubilada se despierta alrededor de las 6 de la mañana y pone en YouTube una rutina de meditación con la que inicia el día, después se prepara un desayuno ligero y abre sus redes sociales para revisar quién le escribió por WhatsApp y por Facebook.
Después de darle de comer a sus dos gatos y a su perrita, sale a hacer las compras del día, cocina, y revisa textos después de comer, pues trabaja de manera remota para una empresa de Reino Unido que le pide hacer revisión de textos traducidos del inglés al español. A partir de las 5 pm se da dos horas para ver YouTube, pues a diferencia de las plataformas de streaming, esta app le permite cambiar de un contenido a otro sin tanta complicación. Tras este periodo, su rutina acaba con otro par de horas de lectura.
De acuerdo con el reporte The Social Media Consumer de Hootsuite, el promedio que pasa Luz María Vázquez es similar al de las personas entre los 65 años y más en la plataforma de video: tres horas y 20 minutos. Pero, ¿por qué les llama tanto la atención?
Por su parte, eMarketer señaló que casi la mitad de la población de América Latina (o sea unos 327.2 millones de personas) son consumidores de contenido de video digital en sus teléfonos móviles este año. Y de estos el 21.7% consume este tipo de videos en YouTube Premium, por lo que la plataforma es la cuarta más vista después de Netflix, Disney y Amazon Prime, según el informe de la firma de análisis en marketing.
Luz María Vázquez ve contenidos en esta app por tres razones: “Una sobrina me ayudó a conectar desde mi teléfono la televisión y me parece más sencillo buscar videos en YouTube, además he encontrado contenidos de viajes y de meditación gratuitos que muchas veces me costaba más trabajo encontrar en otras apps, y por último compartía mi cuenta de Netflix con mi hijo pero ya no quise pagar por el servicio cuando dejaron de permitir que viera en la TV el servicio”.
Como este porcentaje que señaló eMarketer, Vázquez paga una suscripción premium para poder ver los videos sin anuncios y porque en algunos casos puede bajar el video a su smartphone.
“Para la persona promedio en la calle, los motores de búsqueda y la televisión siguen estando en el lugar principal. Sobre todo para adultos mayores, quienes ven contenidos en sus pantallas de la sala”, señaló en el informe sobre Tendencias de Consumo 2023, Hootsuite.
Actualmente, el algoritmo de YouTube ofrece recomendaciones distintas a cada usuario. Estas recomendaciones se basan en los intereses y el historial de visualización de los usuarios y consideran factores como el desempeño y la calidad de los videos.
De acuerdo con Hootsuite, lo que mueve la viralidad en la plataforma de video no es un tema sólo del contenido. “Nuestro algoritmo no presta atención a los videos; presta atención a los espectadores. Así que en vez de hacer videos que hagan feliz al algoritmo, enfócate en hacer videos que hagan felices a tus espectadores”, explica YouTube.
Por ello es que la interacción de los adultos mayores en la plataforma de Google puede ser más sencilla, pues las recomendaciones son más afines y coinciden en lo que dice Luz María Vázquez sobre encontrar contenido afín a lo que consume, de manera más sencilla que buscar en una plataforma de streaming.
Aunque hay más consumidores, los millennials aman YouTube
La plataforma de video ha cobrado relevancia entre los adultos mayores, sin embargo, cifras de Statista señalan que hasta enero de 2024, alrededor del 12% de la audiencia global de YouTube estaba integrada por hombres de entre 25 y 34 años, mientras que las usuarias de dicha edad representaron un poco más del 9% del total. Por su parte, los usuarios mayores de 64 años supusieron menos del 5% del total de la audiencia de la plataforma abierta de video en ambos casos.