Luego de que sus simpatizantes levantaran la mano, el presidente López Obrador aseguró que es un sentimiento de los mexicanos que jueces, magistrados y ministros sean electos por voto ciudadano
Expansión.- En medio de la discusión de la reforma al Poder Judicial, el presidente Andrés Manuel López Obrador pidió a sus simpatizantes votar a mano alzada si están o no de acuerdo en que sean los mexicanos quienes elijan a los jueces, magistrados y ministros por voto directo.
“Vamos a hacer una consulta, que seguro mañana nos van a criticar. ¡Es muy divertido! ¡hacen hasta el ridículo! lo digo con todo respeto, no podríamos vivir tan aburridos. A ver, ustedes qué prefieren, ¿qué lo ministros los elija el presidente y los senadores o que los elija el pueblo?”, preguntó e presidente como parte de su discurso por su sexto y último informe de Gobierno.
En respuesta, el presidente obtuvo gritos de “¡el pueblo! ¡el pueblo!”. Cuando se trato de levantar la mano, ganó la opción de que sean los ciudadanos quienes a través de elecciones elijan a los integrantes del Poder Judicial.
López Obrador aseguró que la votación de jueces, magistrados y ministros es un sentimiento del pueblo, el cual debe ser respetado; incluso, por “los vecinos” de Estados Unidos, país con el cual ha habido diferencias luego de que el embajador Ken Salazar advirtiera que representa un riesgo para la relación comercial.
“Esto ayuda a saber cuál es el sentimiento del pueblo y también lo internalicen los vecinos, amigos, vecinos de Estados Unidos, lo digo con todo respeto, que no olviden que la democracia en América, en Estados Unidos, así comenzó la democracia, eligiendo el pueblo a jueces”, comentó.
El presidente aseguró que el paquete de iniciativas de reforma que envió el 5 de febrero pasado, es muy diferente a lo que solían enviar los gobiernos del periodo neoliberal, en donde no se veía por el interés general, sino de unos cuántos.
“Presentamos al congreso 20 reformas constitucionales para restituirle a la carta magna el sentido revolucionario y popular que tuvo desde su redacción original en 1917. Estas iniciativas son a todas luces distintas y contrapuestas a las reformas que se aprobaron durante los 36 años del nefasto periodo neoliberal, cuando no se pensaba en beneficiar al pueblo, sino en ajustar el marco legal para facilitar el despojo y la entrega de bienes del pueblo y de la nación a una minoría rapaz”, destacó.
A partir de este 1 de septiembre, 18 de las iniciativas del paquete de reformas, el último del gobierno de López Obrador, será discutido por el pleno de la Cámara de Diputados de la 66 legislatura.
La primera en ser discutida será la reforma judicial, sin embargo, el Juzgado Quinto de Distrito concedió una suspensión provisional para frenar la discusión de la Reforma al Poder Judicial.
“Dicho proyecto en particular no podrá ser discutido y votado por la Cámara de Diputados de la nueva legislatura. Es claro que la suspensión resulta procedente, en estos momentos, donde el nuevo Poder Constituyente aún no recibe la iniciativa materia de la controversia”, se lee en el documento que suspende la discusión de la iniciativa debido a que infringe el artículo 186 del reglamento de la Cámara de Diputados y que la nueva legislatura no tendría facultades para discutir una reforma constitucional de esta índole.
No obstante, el líder de la bancada de Morena, Ricado Monreal —quien de facto lidera también a los dipuados el PT y PVEM— señaló que no se frenará la reforma, y la mayoría constitucional que se tiene con sus 257 legisladores la sacará adelante.
