La Oficialía Mayor y la Dirección de Servicios Médicos del Ayuntamiento de la Capital mantienen extremas precauciones para reducir los riesgos de contagio de la variante ómicron de covid-19, así como la influenza estacional, además de que se incrementó a 18 mil el número de pruebas rápidas para diagnosticar coronavirus entre trabajadores municipales.
Con el fin de seguir atendiendo a la población que realice algún trámite, se invitó a sumar esfuerzos, recursos humanos e infraestructura para actuar de manera conjunta ante esta pandemia y garantizar en todo momento el derecho a la salud. Desde el inicio de año opera una brigada permanente de servicios médicos municipales para detectar casos en las áreas del Ayuntamiento. Hasta este lunes 17, se han aplicado un total de 3 mil 032 pruebas a trabajadores de la administración.
Con el fin de contener la propagación del virus, en caso de la detección de casos positivos, de inmediato se aísla a la persona, se le canaliza a la atención médica y se les da una incapacidad laboral.
La Oficialía Mayor del Ayuntamiento informó que alrededor de tres mil 100 trabajadores municipales cuentan con las dos dosis de la vacuna y alrededor de un 10 por ciento tiene la tercera dosis de refuerzo.
Asimismo, dio a conocer que desde hace más de una semana operan túneles de sanitización en los accesos principales a oficinas municipales, además de que se han reforzado los protocolos y medidas de seguridad.
Además se han dado indicaciones a todas las áreas del Gobierno Municipal para reiterar que el uso de cubrebocas es obligatorio en todo momento y todo lugar, así como mantener la sana distancia, lavado de manos y uso del gel antibacterial.
En caso de identificar personas con sospechas de covid-19: temperatura mayor o igual a 38° centígrados, tos, malestar general o dificultad para respirar, acompañados de dolor de articulaciones, dolor muscular, dolor de garganta, enrojecimiento, picazón y ojos llorosos, dolor en el pecho, diarrea, falta de olfato o gusto, estas son referidas al Servicio Médico .
En la población vulnerable, es decir, mayores de 60 años, mujeres embarazadas o personas bajo tratamiento de quimioterapia, se procura el trabajo en casa hasta que las condiciones sanitarias permitan su retorno seguro.
