Activistas de Greenpeace México dieron a conocer que la caverna Angry Wasp, que se se encuentra en el camino de la construcción del Tramo 5 del Tren Maya, que corre de Playa del Carmen a Tulum.
Señalaron que este descubrimiento apunta a que la realización de esta obra en una zona frágil no es una buena idea.
Voluntarios de la ONG, que desde el lunes tienen detenidas las obras al impedir que la maquinaria siga con el desmonte del área donde pasará la vía férrea, explicaron que el sitio es parte de las múltiples cavernas y ríos subterráneos que hay en la zona.
Aunque ambientalistas de diversos colectivos y organizaciones se han manifestado en contra de esta obra, el Gobierno federal no ha informado que vaya a detener los trabajos en la zona.
Organizaciones como Siempre Unidas AC, Centinelas del Agua, Red de Formadores Socioambientales, Moce Yax Cuxtal AC y Jaguar Wildlife Center han expresado su preocupación por esta situación.
Precisamente, la última organización emitió un comunicado en donde resaltan la fragilidad de la zona por donde pretende pasar la vía del Tren Maya, que podría afectar todo el ecosistema de la península de Yucatán.
Wildlife Center explicó que el acuífero subterráneo del que depende la biodiversidad, la agricultura, y toda la vida humana será afectado, ya que los ecosistemas subterráneos, como cuevas, ríos subterráneos y cenotes, corre riesgo de ser destruido.
Estos sitios también albergan una gran diversidad de especies que proporcionan servicios ecosistémicos como el control de plagas agrícolas; la dispersión de semillas para la regeneración de las selvas, y la polinización de muchas plantas ecológica o económicamente importantes.
Con información de El Financiero