Las empresas que no construyan una estrategia en torno a las experiencias deseadas tendrán dificultades para contratar y retener a los mejores talentos.
El Economista.- El trabajo en un entorno flexible ha creado diferentes necesidades para los empleadores y empleados, pero también para quien ofrece sus servicios inmobiliarios, pues ahora tendrán que adaptar sus espacios a las nuevos requerimientos.
El regreso a las oficinas ya no se será como antes, el trabajo ante un entorno flexible ha creado nuevas necesidades para los trabajadores, lo que se traduce en nuevas oportunidades para las empresas dedicadas a la de renta de oficinas, quienes ya se preparan con nuevas propuestas.
De acuerdo con la empresa JLL, los espacios de relajación, los servicios de comida sana y las zonas al aire libre encabezan la lista de comodidades que pueden atraer a los trabajadores a sus oficinas en la ciudad, ya que buscan una sensación de conexión con sus colegas junto con entornos que sean tan cómodos como el hogar, según su propia encuesta realizada a los trabajadores de oficina en un “Reporte de lugar de trabajo regenerativo”.
“A medida que los empleados pasan del trabajo desde casa a un futuro post-pandémico, la gente espera que sus empleadores sean más atentos y que su lugar de trabajo ofrezca una nueva experiencia regenerativa”, dice Flore Pradère, directora global de investigación de JLL Work Dynamics.
Según el estudio de JLL, actualmente sólo el 17% de los trabajadores tiene acceso a espacios de relajación, el 19% a comida sana y el 25% a zonas al aire libre. Para los que sí lo tienen, la aceptación de los servicios de bienestar en la oficina es alta, ya que el 70% de los trabajadores los utilizan semanalmente,“Los empleadores que no construyan una estrategia en torno a las experiencias deseadas tendrán dificultades para contratar y retener a los mejores talentos de su sector”, afirma Ben Tindale, director gerente de cuentas de JLL Work Dynamics – Australasia.