“El cáncer de mama no es rosa. Necesitamos más investigación para más vida. Una cura real contra esta pandemia ignorada”, afirma Karla Barajas, periodista sobreviviente al cáncer de mama
En entrevista para Arriba San Luis con Eva María Camacho y Jesús Aguilar , Karla Barajas Juárez, periodista sobreviviente del cáncer de mama, relató que tuvo cáncer de mama en 2018 y que encontró el tumor por “casualidad”.
Dijo que al rozar con su brazo el seno izquierdo sintió una bola del tamaño de una pelota de golf y tras realizarse los estudios necesarios le informaron que tenía un tumor y que era maligno. Con ello buscó y recibió la atención necesaria.
Afirmó que el cáncer de mama no tiene nada de rosa y no hay nada que celebrar, ya que se requiere más recursos e investigación para encontrar una cura contra esa enfermedad que mata a más mujeres en México.
“El cáncer de mama no tiene nada de rosa, no tenemos nada que celebrar este día, al contrario, tenemos mucho trabajo por hacer, tenemos que exigir tanto a nivel nacional como internacional, que se dedique más dinero a la investigación, a la ciencia para que se encuentre una cura real contra esta enfermedad que mata a muchas mujeres al año en México y que desgraciadamente se presenta cada vez en mujeres más jóvenes”.
Destacó que una vez que se ha detectado, es importante atenderse inmediatamente para tener más probabilidades de sobrevivir.
Consideró que el famoso “octubre rosa” ya se volvió un negocio ya que muchas empresas pintan su producto de rosa y en realidad destinan pocos recursos para el combate y tratamiento de esa enfermedad, por lo que hizo un llamado a no consumir dichos productos.
“El lazo rosa se creó solo para comercializar, el lazo primero era color durazno y fue creado por una mujer en Estados Unidos que tuvo cáncer de mama”.
En su caso dijo que recibió 10 sesiones de quimioterapia, ya que comenzó a tener otros efectos. Le hicieron una mastectomía radical, además de las sesiones de radiación. Además toma una caja de 30 pastillas que tiene un costo de 4 mil e inyecciones con un costo aproximado de 13 mil pesos.
Añadió que cada año tiene que realizarse un escáner de cuerpo completo para asegurar que el cáncer no ha regresado, además de las citas con ginecóloga y demás doctores.
Respecto a su alimentación como un tratamiento adicional a la enfermedad que curso dijo que es importante tener un estilo de vida y una dieta saludable, comer sano, hacer ejercicio e ir a terapia psicológica para estar mejor emocionalmente.
Finalmente invitó a las personas a valor las pequeñas cosas que se dan por hecho, disfrutar la vida y valorar el cariño que se tiene alrededor.
Karla Barajas es egresada del Iteso, trabajó en los diarios Siglo 21 y Público. Y es chef repostera.