CNN.- El Senado de Estados Unidos aprobó este jueves una legislación para evitar la suspensión de operaciones ferroviarias, luego de la grave advertencia del presidente Joe Biden acerca del peligro económico que implicaría una huelga.
La Cámara de Representantes aprobó el acuerdo ferroviario tentativo este miércoles. La medida ahora se enviará al escritorio del presidente para su promulgación.
La votación se dio después de que aumentara la presión sobre los legisladores para que actuaran con rapidez. El líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, dijo este jueves que los miembros de la cámara “no pueden irse hasta que terminemos el trabajo”.
Sin la acción del Congreso, una huelga ferroviaria habría empezado el 9 de diciembre provocando escasez, aumentando los precios y deteniendo la producción en fábricas. También podría haber interrumpido los servicios ferroviarios de cercanías para hasta siete millones de usuarios al día y el transporte de 6.300 vagones de alimentos y productos agrícolas diarios, entre otros artículos, según una recopilación de grupos empresariales.
Una posible complicación en el esfuerzo por aprobar el proyecto de ley había sido el impulso de los progresistas para agregar una disposición relacionada con la licencia por enfermedad remunerada.
Este jueves, el Senado no aprobó una medida de licencia por enfermedad remunerada que sí había pasado en la Cámara de Representantes y tenía el respaldo de progresistas.
Con una votación de 290 a 137, la Cámara aprobó el acuerdo ferroviario tentativo que evitará una huelga. La votación fue en gran parte bipartidista, con 79 republicanos uniéndose a los demócratas para votar por el proyecto de ley. Ocho demócratas votaron en contra del acuerdo.
En una votación distinta, la Cámara de Representantes también votó 221 a 207 para agregar la licencia por enfermedad remunerada que respaldaban los progresistas en el acuerdo ferroviario.
Una huelga de trenes de carga podría costarle a la economía estadounidense US$ 1.000 millones solo en su primera semana, según un nuevo análisis del Anderson Economic Group.
Como resultado, Biden presionó al Congreso para que aprobara “inmediatamente” la legislación para evitar una suspensión de operaciones ferroviarias.
Al llamarse a sí mismo un “orgulloso presidente prolaborista”, Biden dijo en su declaración de este lunes: “Soy reacio a anular los procedimientos de ratificación y las opiniones de quienes votaron en contra del acuerdo. Pero en este caso, donde el impacto económico de una suspensión de operaciones perjudicaría a millones de trabajadores y familias, creo que el Congreso debe usar sus poderes para adoptar este acuerdo”.
La suspensión de operaciones ferroviarias, advirtió Biden, “devastaría la economía”.
