Distintos tipos de virus alcanzan su punto álgido con el frío y la sequedad.
La Vanguardia.- Parece que por fin el asfixiante calor que ha presidido el año 2022 está a punto de ceder el paso a temperaturas más refrescantes. Y con el frío, llegan los resfriados y otras enfermedades asociadas a esta época del año. ¿Por qué en invierno es más frecuente enfermar? No hay una única causa que explique este fenómeno, pero la principal es que la mayoría de virus respiratorios estacionales se reproducen a mayor velocidad y están más preparados para sobrevivir más tiempo a temperaturas bajas. Además, en la época invernal solemos permanecer más tiempo en lugares cerrados con más personas, lo que multiplica las posibilidades de contagio.
Diversos estudios han demostrado que las epidemias de gripe se desarrollan más fácilmente en climas fríos y secos, como sucede en Europa en invierno. El rinovirus, causante de los habituales catarros, y el virus de la gripe, por ejemplo, aparecen especialmente en esta época del año. Muchos gérmenes encuentran un entorno propicio en lugares fríos y, el sistema inmunitario del ser humano funciona mejor en temperaturas cálidas.
¿Por dónde entran los virus?
Lo más frecuente es que estos virus entren en el organismo a través de las vías respiratorias altas: nariz y boca. Pese a que tenemos la idea de que se trata de enfermedades leves que todos pasamos varias veces a lo largo de nuestra vida, la realidad es que la gripe y los resfriados que se complican pueden ser muy peligrosos. Aproximadamente mil millones de personas se infectan cada año con estas variedades de virus y alrededor de medio millón mueren.
Habitualmente son enfermedades que desaparecen al cabo de una semana y no existen remedios que erradiquen completamente estos virus. Sin embargo, para tratarlos existen los antivíricos y, como medida preventiva, las vacunas, como fármacos más utilizados.
Población más vulnerable
- Niños
- Ancianos
- Personas con enfermedades crónicas, como las respiratorias
Además de los citados virus del catarro y de la gripe, las enfermedades más comunes incluyen también la amigdalitis y el coronavirus. En bebés lactantes se dan también casos de bronquiolitis. Las medidas preventivas básicas para prevenir infecciones son el lavado de manos de forma frecuente, y no permanecer en espacios cerrados que sean muy concurridos. También es conveniente ponerse la vacuna de la gripe, así como la de la COVID-19.
Los virus más frecuentes en época de frío son influenza (gripe), rinovirus (catarros), coronavirus, virus respiratorio sincitial o VRS (principal causa de la bronquiolitis de los lactantes), parainfluenza (laringitis) y adenovirus (faringoamigdalitis). En niños los más habituales son el VRS, el adenovirus y el rinovirus. Hay que estar atentos a detectar señales que indiquen el posible inicio de la enfermedad. Los principales síntomas son la aparición de fiebre que puede llegar a ser alta, dolores de cabeza resistente a los analgésicos y presión arterial baja.
