Sumilab S.A. de C.V. fue incluida en la lista negra del Departamento de Tesoro de Estados Unidos debido a su relación con los hijos de Joaquín Guzmán Loera.
Infobae.- Con más de tres décadas de experiencia, la empresa mexicana Sumilab S.A. de C.V. sostuvo contratos y proveyó con varios de sus productos a los gobiernos de Sinaloa, Sonora, Chiapas, Chihuahua y Puebla, pero además participó en el suministro y envío de precursores químicos a miembros del Cártel de Sinaloa para fabricar drogas sintéticas.
Debido a sus relaciones delictivas, el 9 de mayo la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) incluyó en su lista negra a dicha empresa cuya sede se ubica en Culiacán, Sinaloa, el principal bastión del también llamado Cártel del Pacífico.
De acuerdo con el Departamento de Tesoro de Estados Unidos (EEUU), Sumilab abastecía con sustancias químicas a socios de ‘Los Chapitos’, quienes las empleaban en los laboratorios clandestinos para la elaboración de enervantes, como fentanilo, principalmente.
Sin embargo, al mismo tiempo que surtía precursores a los hijos de Joaquín El Chapo Guzmán, también se dedicó a vender varios de sus productos y equipos a hospitales, universidades y dependencias gubernamentales, gracias a lo cual se benefició con millones de pesos.
De acuerdo con su página web, Sumilab cuenta con más de 33 años de experiencia en la “comercialización y distribución de productos, equipos y materiales para todo tipo de laboratorios de investigación, industriales, educacionales, clínicos, agrícolas y acuícolas”, por lo que dispone de un amplio abanico de clientes potenciales.
Entre sus valores resalta la excelencia, calidad, eficiencia, innovación, responsabilidad y honestidad, aunque esto contrasta con los señalamientos de la OFAC por su vinculación con ‘Los Chapitos’, uno de los máximos responsables del tráfico de fentanilo a EEUU.
Principales contratos de Sumilab
Según datos de la Plataforma Nacional de Transparencia, uno de los mayores beneficiarios fue el Instituto Sinaloense de Infraestructura Física Educativa de Sinaloa, el cual en 2021 adquirió equipamiento a Sumilab para la Universidad Politécnica del Mar y la Sierra por tres millones 965 mil 894 pesos.
Asimismo, de 2020 a 2022 dicha empresa también abasteció al Hospital Civil de Culiacán de material para laboratorio por montos que van desde los mil 500 hasta los 30 mil pesos. Entre las instituciones educativas a las que también proveyó de equipo se encuentra la Universidad Politécnica del Valle del Évora y el Instituto Tecnológico Superior de Guasave.
De 2018 a 2022, Sumilab se benefició de contratos con el gobierno de Sinaloa -la mayoría durante la administración de Quirino Ordaz Coppel, actual embajador de México en España-, pues los montos superaron los 14 millones de pesos, según las 71 facturas presentadas en la Plataforma Nacional de Transparencia.
Sin embargo, los gobiernos de Chihuahua, Chiapas, Puebla, Nayarit, Durango y Sonora también compraron equipo a la empresa vinculada con el Cártel de Sinaloa durante los últimos cuatro años, aunque en menor medida.
Entre las dependencias federales a las que Sumilab suministró de materiales se encuentra una oficina de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y un par de centros del Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt). Desde 2018, el Gobierno Federal ha otorgado hasta 2,7 millones de pesos a la empresa sinaloense, según informes retomados por El País.
Además de Sumilab, la OFAC también bloqueó en aquella ocasión a otra empresa mexicana de nombre Urbanización, Inmobiliaria y Construcción de Obras S.A. de C.V., cuya sede también se ubica en Culiacán, Sinaloa.
De acuerdo con las autoridades estadounidenses, esa empresa es propiedad de Mario Esteban Ogazón Sedano, originario de Sinaloa y nacido el 14 de julio de 1980. Este sujeto de 42 años se encargaba de la operación de los laboratorios clandestinos donde se elaboraban las drogas sintéticas. De igual manera, contactaba a Ludim Zamudio Lerma (un proveedor del Cártel de Sinaloa) para adquirir los precursores químicos empleados en la elaboración de dichas sustancias.