Con la participación de las facultades de Medicina Veterinaria y Zootecnia, de Psicología, Química; el asesoramiento de la Clínica de Obesidad y Trastornos de la Conducta Alimentaria del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, así como la Clínica de Obesidad Infantil del Hospital General de México, esta oferta educativa de la casa de estudios, suma en total 130 carreras.

De acuerdo con la UNAM, el objetivo del plan de estudios, será formar profesionistas con conocimiento científico, clínico y social, con base en los diagnósticos clínico-nutricional y nutricional-comunitario mediante la evaluación del estado de nutrición, vigilancia alimentaria-nutricional, orientación y educación alimentaria que permita ayudar a resolver los problemas que enfrenta el país en materia de salud.

Asimismo, la universidad busca que los alumnos que cursen esta carrera, ejerzan la investigación desde un enfoque interdisciplinario, a fin de atender los problemas relacionados con la alimentación en los niveles individual y colectivo, con valores y principios éticos con la finalidad de que puedan ser agentes de cambio y contribuir al mejoramiento de la salud local, nacional, así como internacional.

El plan de estudios está diseñado en ocho semestres en los que se cubrirán 449 créditos, distribuidos en 58 asignaturas (53 obligatorias y cinco optativas). Al finalizar, los alumnos deberán realizar un año de servicio social.

De acuerdo con la UNAM, el ingreso será indirecto, es decir, los aspirantes deberán ser aceptados en cualquiera de las carreras del área Ciencias Biológicas, Químicas y de la Salud que se imparten en la Universidad Nacional y posteriormente, participar en el proceso de selección interno para Ciencia de la Nutrición Humana. El cupo inicial será de 30 alumnos.

En el proyecto de creación se señala que la nueva licenciatura se alinea con los programas estratégicos del Plan de Desarrollo Institucional 2015-2019, relacionados con los planes y programas de estudio; investigación; desarrollo integral de los universitarios, y participación de la UNAM en el progreso nacional.

“La Ciencia de la Nutrición Humana debe ser la base de las políticas alimentarias y nutricionales. Estas deben diseñarse para identificar, crear, conservar y proteger los sistemas alimentarios comunitarios, nacionales y globales, racionales, sostenibles y equitativos, con el fin de sostener la salud, el bienestar y la integridad de la humanidad”, afirma el documento.