El presidente Andrés Manuel López Obrador reveló un proyecto para importar petróleo y construir refinerías de bajo costo en México de la mano de la iniciativa privada.
Se trata de una propuesta de una compañía privada de origen mexicano para comprar crudo superligero en Estados Unidos, importarlo y refinarlo en la región del Istmo de Tehuantepec, mediante una asociación con la empresa productiva del Estado, Petróleos Mexicanos (Pemex).
“Esta empresa de mexicanos ofrece tener petróleo ligero, traerlo al Istmo, allí poner estas plantas y hacer una sociedad con Pemex. Estamos nosotros de acuerdo, siempre y cuando Pemex tenga mayor número de acciones, que
sea empresa mayoritaria”, declaró el mandatario durante su conferencia matutina.
Aunque no detalló el nombre de la compañía, López Obrador dijo que las refinerías modulares que pretende instalar pueden procesar fácilmente los crudos ligeros (Olmeca), a diferencia del crudo pesado (Maya) que actualmente extrae Pemex.
La actual administración está rehabilitando las seis refinerías de Pemex y construyendo una séptima en Dos Bocas, Tabasco para acabar con la importación de combustibles.
El político tabasqueño reconoció que su gobierno no tiene más presupuesto público para invertir en nuevas refinerías, y los inversionistas mexicanos pondrían el capital privado porque tienen asegurada la venta a la petrolera mexicana, la principal distribuidora del combustibles.
En octubre de 2018, el entonces presidente electo criticó la compra de crudo ligero en Estados Unidos por parte de Pemex.
“Es una muestra más del gran fracaso de la política económica neoliberal, o neoporfirista, de los últimos 30 años”, dijo el político tabasqueño en su cuenta de Twitter.