Entre los productos asociados con un menor impacto al medio ambiente están bicicletas, calentadores y paneles solares, copas menstruales, pañales ecológicos y purificadores de agua reutilizables.
Expansión.- Calcular la huella de carbono individual implica considerar una serie de factores, como el medio de transporte utilizado, la dieta, el uso de plásticos y electrodomésticos en el hogar. Los millennials no solo son conscientes de esto, sino que también han hecho un cambio significativo en sus hábitos de compra, dirigiéndolos hacia productos que generan un menor impacto ambiental.
Esta tendencia se manifiesta en diversas acciones, desde la adquisición de ropa de segunda mano hasta la elección de electrodomésticos que ahorran energía, la preferencia por alimentos orgánicos, champús y jabones sostenibles, el uso de bicicletas y la compra de teléfonos móviles reacondicionados. Además, los consumidores de esta generación muestran su interés por productos con envases reciclables y buscan reducir al máximo el embalaje en sus compras en línea.
“Lo peculiar de los productos con impacto positivo es que no son de una sola categoría, no sólo son de belleza, cuidado personal o alimentos. Es transversal a las categorías comerciales”, dice José Ignacio de Carli, gerente de sustentabilidad regional para Mercado Libre.
Melanie Ramos, una consumidora de 34 años, comparte que encuentra más conveniente adquirir productos sostenibles para el cuidado personal a través de pequeños emprendimientos en línea. Además, menciona que opta por comprar ciertos productos a granel para poder reutilizar los envases.
“Durante la pandemia, me di cuenta de la cantidad de residuos que generaba en un solo día, especialmente cuando hacía compras en el supermercado o pedía en línea. Tiraba muchas cajas y, aunque hacía la separación de basura, comenzó a generarme estrés. No sabía por dónde empezar, así que comencé a buscar ideas en redes sociales, empecé a utilizar mis propios envases reutilizables y, finalmente, llegué al punto de considerar la adquisición de productos orgánicos y sostenibles”, relata Ramos.
Su caso no es aislado. Según el informe Expectativas del consumidor sostenible en México, elaborado por la consultora Zinklar, el 67% de los compradores mexicanos, predominantemente millennials en términos demográficos, manifiesta un firme compromiso con la protección del medio ambiente. Asimismo, seis de cada diez se declaran partidarios del consumo responsable.
En el análisis efectuado por la consultora, se destaca que el 44% de los compradores mexicanos muestra una preferencia por productos sostenibles, mientras que el 42% elige conscientemente marcas que tienen un compromiso ambiental. Estos cambios en las actitudes de compra son, en parte, una respuesta a la pandemia, que ha generado un incremento en la concienciación sobre la importancia de la salud personal.
Las oportunidades para las empresas en este ámbito son significativas. A nivel mundial, el mercado de la sostenibilidad alcanzó un valor de 15,850 millones de dólares en 2022 y se prevé que experimente un crecimiento anual compuesto (CAGR) del 22.7% desde 2023 hasta 2030. Este crecimiento se impulsa gracias a una creciente conciencia ambiental y las preocupaciones sobre el aumento del calentamiento global tanto entre organizaciones como individuos, según datos de Grand View Research.
¿Qué compran y en dónde?
Entre los productos asociados con un menor impacto ambiental están bicicletas, calentadores solares, paneles solares, copas menstruales, pañales ecológicos, purificadores de agua, desodorantes naturales y botellas reutilizables. Sin embargo, no solo se trata de los productos en sí, sino también de sus envases, que prescinden de bolsas reutilizables y embalajes adicionales, opciones que se ofrecen al realizar una compra.
Las tiendas en línea han emergido como uno de los canales de ventas prominentes para productos sostenibles, con un notable crecimiento en ventas que se ha incrementado en un 120% entre 2020 y 2023 en el marketplace de Mercado Libre.
“Este patrón de uso del comercio electrónico se relaciona con las diferentes generaciones de usuarios, pero es importante destacar que observamos un crecimiento sostenido año tras año”, destaca el directivo de la plataforma.
El costo de reducir la huella de carbono individual
El aumento del costo de vida aún representa una limitante para incrementar el consumo de productos sostenibles, con la mitad de los consumidores asegurando que aún dan prioridad a la compra de artículos asequibles sobre las alternativas sostenibles, ya que las marcas respetuosas con el medio ambiente a menudo venden productos a precios muy por encima de sus presupuestos.
Si bien a menudo se hace referencia a la Generación Z como la “generación del cambio climático”, su poder adquisitivo comparativamente menor a la de los millennials les impide participar en un nivel similar de compras sostenibles.
Ramos reconoce que, a largo plazo, la inversión en productos sustentables puede conllevar un costo adicional, sobre todo cuando se trata de artículos como pasta de dientes, champú, jabón para lavar trastes y algunos alimentos orgánicos.
Un ejemplo concreto de esta tendencia es el champú sólido, que prescinde de cajas o envases de plástico y puede tener un precio superior a los 300 pesos. Sin embargo, su valor radica en la utilización de ingredientes naturales que minimizan la contaminación del agua. “Esta inversión se equilibra con otras ventajas, como el ahorro en transporte al optar por la bicicleta o la reducción de costos al llevar tu propia taza para disfrutar de un café”, explica.
En el período comprendido entre abril de 2022 y marzo de 2023, el crecimiento en el consumo real de estos productos en Mercado Libre fue del 30%, según el informe Tendencias de consumo online con impacto positivo. Sin embargo, el número de consumidores interesados en productos sostenibles sólo creció 16% en el mismo periodo. Esto sugiere que el consumidor que antes compraba un producto sostenible, ahora adquiere dos.
