Activistas climáticos irrumpen en la gigafábrica de Tesla en Europa
La única gigafábrica europea del fabricante de autos eléctricos, propiedad de Elon Musk, se convirtió en blanco de protestas cada vez más radicales desde que anunció sus planes de expansión.
WIRED.- Los manifestantes protestaron el viernes contra la fábrica de Tesla cerca de Berlín (Alemania), como parte de una movilización de cinco días contra los planes de expansión local del fabricante de automóviles.
Las imágenes difundidas en redes sociales mostraban a una multitud de manifestantes vestidos de negro en las instalaciones de Tesla y corriendo hacia uno de los edificios de la planta.
“Ochocientas personas entraron en las instalaciones de la gigafábrica”, declaró a WIRED Lucia Mende, vocera del grupo Disrupt Tesla. Añadió que los activistas se dirigieron a un aeródromo abandonado que, según informaron los medios de comunicación alemanes, Tesla utilizaba para almacenar miles de automóviles no vendidos. “Quieren impedir la expansión de la fábrica”, señaló Mende refiriéndose a los manifestantes.
The Anti-Tesla activists brake through the police lines and reach the fence of #Gigafactory. Police seems disoriented.#DisruptTesla #Grünheide pic.twitter.com/ir64DfY8qL
— the brake (@TheBrakeNet) May 10, 2024
Manifestantes contra la ampliación de la gigafábrica europea de Tesla
“Varias personas están intentando acceder sin autorización a las instalaciones de la fábrica de Tesla”, informó la policía local en X hacia el mediodía, hora local. “Estamos trabajando para impedirlo”.
Mende aseguró que se habían realizado detenciones, pero no sabía cuántas. Ni la policía ni Tesla respondieron inmediatamente a la solicitud de comentarios de WIRED.
“Desde el bosque hemos sido testigos del modo en que los manifestantes traspasaron las filas de la policía para entrar en los terrenos de la fábrica”, contó a WIRED una de las manifestantes, Mara, vocera de un grupo llamado Stop Tesla. “Nos unimos para desestabilizar a Tesla”. Irrumpir u ocupar instalaciones industriales es una táctica habitual empleada por los sectores más radicales del movimiento contra el cambio climático en toda Europa.
La fábrica alemana de Tesla, que produce automóviles eléctricos y baterías, lleva meses siendo objeto de protestas por parte de activistas climáticos, que califican de farsa las credenciales ecológicas de la compañía.
“Empresas como Tesla están ahí para salvar la industria automovilística, no para rescatar el planeta”, comentó la semana pasada a WIRED Esther Kamm, vocera de Turn Off the Tap on Tesla (conocida por sus siglas en alemán TDHA).
En febrero, la fábrica producía 6,000 autos a la semana. Pero la actividad se interrumpió el viernes anticipándose a la protesta. El director de la fábrica, André Thierig, confirmó a principios de semana que habría una “suspensión programada de un día”.
Tesla había comunicado sus planes de ampliar el complejo hacia el bosque cercano para producir un millón de vehículos al año en este lugar, que es su única gigafábrica en Europa.
A estos planes de expansión se opone una alianza de residentes y activistas contra el cambio climático. Desde febrero, los manifestantes viven en un campamento forestal a pocos pasos de la valla perimetral de la fábrica.
A primera hora del viernes, la policía declaró que la estación de tren local, Fangschleuse, permanecía cerrada porque había gente sentada en las vías. Desde entonces se volvió a abrir.
