Activistas medioambientales asesinados a un ritmo de uno cada dos días en 2022: informe
Colombia fue el país más mortífero y una quinta parte de los 177 asesinatos registrados tuvieron lugar en la selva amazónica, dice Global Witness
The Guardian.- Según nuevas cifras, al menos 177 personas fueron asesinadas el año pasado por defender el medio ambiente, y una quinta parte de los asesinatos tuvieron lugar en la selva amazónica.
Asesinados por grupos del crimen organizado e invasores de tierras, los defensores del medio ambiente fueron asesinados a razón de uno cada dos días en 2022, según muestran las cifras de la ONG Global Witness . Colombia fue el país más mortífero, registrando 60 asesinatos.
Las comunidades indígenas estaban representadas de manera desproporcionada en las cifras, representando el 34% de todos los asesinatos, a pesar de representar alrededor del 5% de la población mundial. Las nuevas cifras significan que al menos 1.910 defensores del medio ambiente han sido asesinados entre 2012 y 2022, según Global Witness, y la mayoría de los asesinatos quedan impunes.
Brasil, México, Honduras y Filipinas fueron los países más mortíferos en 2022 después de Colombia. Casi el 88% de todos los ataques letales se registraron en América Latina, incluidos los asesinatos del activista brasileño Bruno Pereira y del periodista Dom Phillips en julio.
Las cifras son una caída con respecto a los 200 asesinatos registrados en 2021, pero siguen siendo altas, lo que llevó a Global Witness a pedir protecciones especiales para los defensores ambientales de los ecosistemas críticos para el clima.
El informe destaca la lucha por los recursos en América Latina, Asia y África como motor de la violencia, incluida la extracción de minerales de tierras raras utilizados en la producción de automóviles eléctricos y turbinas eólicas.
“Durante demasiado tiempo, los responsables de ataques letales contra defensores se han salido con la suya”, afirmó Shruti Suresh, codirectora de campañas de Global Witness.
“A pesar de estar amenazados por acciones corporativas y gubernamentales irresponsables, este movimiento global de personas, unidos por la determinación y el compromiso de defender sus hogares y comunidades, se mantienen firmes, y no pueden ni serán silenciados”.
El informe ha sido elaborado anualmente durante los últimos 11 años por Global Witness, que insta a los gobiernos a hacer cumplir las leyes existentes para crear un entorno seguro para las personas que intentan proteger sus tierras y ecosistemas. Pidió a las empresas que se aseguren de que sus cadenas de suministro y actividades no participen en el impulso de la violencia.
La falta de denuncias de ataques en todo el mundo significa que es probable que las cifras estén subestimadas, especialmente en África y Asia. Los ataques no letales para silenciar a los defensores del medio ambiente probablemente fueron mucho mayores, pero difíciles de registrar, afirmó Global Witness.
Laura Furones, experta en gobernanza forestal que asesoró sobre el informe, destacó los ataques contra las comunidades indígenas como un motivo particular de preocupación.
“Las investigaciones han demostrado una y otra vez que los pueblos indígenas son los mejores guardianes de los bosques y, por lo tanto, desempeñan un papel fundamental en la mitigación de la crisis climática”, afirmó. “Sin embargo, están bajo asedio en países como Brasil, Perú y Venezuela por hacer precisamente eso.
“Si queremos mantener los bosques en pie, debemos reconocer que esto depende de la protección de aquellos que consideran el bosque su hogar”.
