El Universal.- Luego de que durante el período más crítico de la pandemia, el 30 por ciento de las unidades comerciales en San Luis Potosí se vieron obligadas a cerrar de forma definitiva por la falta de liquidez, los negocios y establecimientos comerciales sobrevivientes hoy deben afrontar un nuevo reto, la inflación.
En entrevista con Juan Servando Branca Gutiérrez presidente local de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco Servytur), reconoció que el reto para este segundo semestre será sin lugar a dudas hacer frente a las repercusiones de la inflación, pues esto vuelve a poner en “desventaja” al sector terciario que se ve obligado a realizar ajustes en los precios de los bienes o servicios que se ofrecen.
El también líder de la Alianza Empresarial que alberga a 11 organizaciones empresariales en el Estado potosino, explicó que, es una realidad que “con el mismo dinero hoy las familias compran y hacen menos”.
Señaló que partiendo de que los combustibles y servicios básicos como la luz y gas se han incrementado, los productos que se trasladan vía terrestre ya están siendo ajustados en su valor, “o tenemos de otra, este aumento se tiene que trasladar al consumo final”, lamentó.
Branca Gutiérrez expuso que está condición llega en el peor momento, pues el sector terciario -que fue de los más afectados por la pandemia-, apenas se encontraba en vías de reactivación, por lo que la consolidación de una recuperación económica pareciera que tardará más de lo previsto.
