Como parte de las medidas preventivas que realiza el Gobierno de San Luis Potosí frente a la emergencia sanitaria por la pandemia por COVID-19, el Gobernador Ricardo Gallardo Cardona dio a conocer que se adquirieron 200 mil pruebas diagnósticas del virus que serán aplicadas de manera gratuita entre las y los potosinos de las cuatro zonas del Estado, durante este mes.
Lo anterior, se suma al trabajo de corresponsabilidad para cortar la cadena de transmisión entre la población, al detectar casos positivos y realizar las labores de aislamiento con el fin de que la situación no empeore, dijo el Mandatario.
Puntualizó que en la capital, las reacciones adquiridas serán administradas en el Hospital Central “Dr. Ignacio Morones Prieto”, además de que se abrirán dos puntos más: uno en Palacio de Gobierno y otro en el estacionamiento del Centro de Convenciones, donde la atención será en el mismo automóvil sin necesidad de que las personas desciendan de la unidad.
El Gobernador potosino invitó a las personas que tengan algún síntoma de COVID-19 o que hayan estado en contacto con algún paciente confirmado a que acudan a realizarse la prueba de detección, lo que ayudará a reducir el número de contagios y, por consiguiente, el de hospitalizaciones.
Asimismo, informó que a través de la Secretaría de Salud se refuerzan y se exhorta a la implementación de los protocolos sanitarios en el Estado con los diversos sectores, e hizo un llamado para que en el entorno laboral y familiar se haga lo mismo, para minimizar junto con la vacunación los riesgos de contagios entre la ciudadanía.
Gallardo Cardona dijo que la compra de reacciones para detectar el coronavirus la realiza el Gobierno del Estado en el marco de la estrategia para disminuir los contagios de la enfermedad, pero es indispensable la colaboración de la toda la población, quien debe mantener las medidas preventivas como la sana distancia y el uso de cubrebocas en todo lugar y momento.
Por último, dijo que las 200 mil pruebas adquiridas son un hecho inédito en la Entidad, ya que en la herencia maldita la anterior administración compró solamente 40 mil pruebas a pesar del auge de la pandemia, pero los registros avalan sólo 20 mil aplicadas, “del resto no sabemos qué pasó, si no llegaron y sólo las facturaron”.
