
Jamie y Fiongal compartieron un alegre video desde el aeropuerto antes de abordar el vuelo de Air India que se estrelló.
ABC.- La tragedia del vuelo AI-171 de Air India sigue estremeciendo al mundo. Entre las presuntas víctimas se encuentra una pareja británica que, horas antes del accidente, compartió un video en redes sociales desde el aeropuerto de Ahmedabad.
Sus palabras, ahora cargadas de dolor, quedaron registradas como su última aparición pública.
El video viral que conmocionó a sus seguidores
Jamie Ray Meek y Fiongal Greenlaw-Meek, esposos británicos y fundadores del proyecto espiritual The Wellness Foundry, compartieron desde su cuenta de Instagram (@wellnessfoundry) un video justo antes de abordar el avión que jamás llegaría a su destino.
“Estamos en el aeropuerto, sólo abordando. Adiós, India”, dice Fiongal con una sonrisa mientras enfoca a su esposo Jamie, quien añade con tranquilidad: “Adiós, adiós. 10 horas de vuelo para volver a Inglaterra”.
All 242 Air India passengers are feared dead. On screens, they are numbers. But behind each number are real human lives.
This video by a young gay British couple on their last night in India shook me to the core. So many futures cut short today. So many stories left unwritten. pic.twitter.com/P1ZOX5MzOJ
— Anish Gawande (@anishgawande) June 12, 2025
Aún no confirman su fallecimiento, pero sus redes ya se llenaron de despedidas
Aunque las autoridades no han confirmado oficialmente su fallecimiento, los seguidores de la pareja han llenado sus perfiles con mensajes de despedida y condolencias, convencidos de que ambos iban a bordo del vuelo AI-171.
La tragedia del vuelo AI-171
El vuelo AI-171, con 230 pasajeros, 2 pilotos y 10 tripulantes, se estrelló poco después de despegar del Aeropuerto Internacional Sardar Vallabhbhai Patel.
El avión cayó en una zona urbana de Meghaninagar, dejando más de 200 muertos. Hasta el momento, solo se ha confirmado un sobreviviente.

Air India colabora con las autoridades en la investigación para esclarecer las causas del siniestro. La pareja británica, que buscaba conectar espiritualmente con el mundo, terminó conmoviendo a miles… con una sonrisa y una despedida inesperadamente final.