De ganar la Presidencia de Estados Unidos, el discurso antiinmigrante y proteccionista de los republicanos puede traducirse en acciones en contra de México con las que deberá lidiar el nuevo gobierno.
Expansión.- La carrera para renovar la Presidencia de Estados Unidos serán una tormenta para México y su próxima presidenta, Claudia Sheinbaum.
El discurso antiinmigrantes, la visión proteccionista de la economía y las duras posturas del candidato presidencial Donald Trump y de su aspirante a la vicepresidencia J.D. Vance por la falta de acciones contundentes del gobierno mexicano ante los grupos del crimen organizado, amenazan con generar inestabilidad en la política interna de México.
A decir de internacionalistas, de llegar los republicanos a la Casa Blanca, México tendrá que utilizar toda su experiencia diplomática para negociar con un posible próximo gobernante, que sabe atacar para debilitar.
El Trump de la campaña 2024 ha mostrado que sigue siendo el viejo conocido del 2016 y 2020. En los primeros días como candidato advirtió que impondrá aranceles de 100% a automóviles asiáticos que se fabriquen en México, reveló que en su momento “nos dieron todo lo que queríamos, todo lo conseguí de México”, propuso continuar con la construcción del muro, y acusó que México está petrificado ante los cárteles de la droga y que éstos pueden quitar a un presidente en dos minutos.
“Trump sigue siendo Trump, era muy difícil esperar una transformación tan radical de una persona tan polarizante, tan divisiva, de una figura tan controversial”, apunta Verónica Ortiz, analista política y experta en la relación México-Estados Unidos.
Ahora en 2024, Donald Trump ha optado por un discurso radical, el cual, en caso de ganar en noviembre próximo, puede traducirse en acciones y amenazas contra México.
“Con Trump vamos a ver que su discurso se va a traducir en actos, es decir, vamos a ver intentos de ampliar el muro, de revisar el asunto de DACA, de todos los mexicanos que llegaron siendo niños a Estados Unidos, veremos amenazas de cierre de las fronteras. Si el candidato republicano es quien obtiene la victoria, será una situación muchísimo más complicada para el gobierno mexicano”, explica Juan Manuel Ortega, profesor de la Escuela de Ciencias Sociales y Gobierno del Tec de Monterrey.
En su plataforma oficial de gobierno , el Partido Republicano propone realizar una “deportación de millones de migrantes”, continuar con la construcción del muro en la frontera, restablecer programas antiimigración de la primera era Trump como “Quédate en México”, así como enviar militares a la frontera compartida con México.
“Completaremos el muro fronterizo, trasladaremos porciones masivas de las fuerzas del orden federal a las fuerzas de inmigración y utilizaremos tecnología avanzada para monitorear y asegurar la frontera. Usaremos todos los recursos necesarios para detener la invasión, incluido el traslado de miles de tropas actualmente estacionadas en el extranjero a nuestra propia frontera sur”, dice el capítulo Sellar la Frontera y detener la invasión migrante de la plataforma.
Javier Urbano, profesor e investigador del Departamento de Estudios Internacionales en la Universidad Iberoamericana, considera complicado que de llegar Trump cumpla con su propuesta de realizar una deportación masiva.
“La propuesta de Trump es un discurso para el votante, en la práctica operativa el sistema migratorio es incapaz de hacer redadas masivas. Tendrá tres o cuatro décadas que los sistemas de tramitación de deportaciones, asilo y refugio están totalmente desarticulados, es muy disfuncional para que puedas hacer un proceso masivo de deportación”, argumenta.
Sin embargo, el académico advierte que sí puede ejercer presión para que México, de nueva cuenta, ayude a contener migrantes en su frontera sur a través de operativos migratorios o con programas como el “Quedate en México”, que el gobierno actual adoptó luego de los amagos de Trump en su primera presidencia y el cual obligaba a las personas a esperar en territorio nacional a que avanzaran sus solicitudes de asilo a EU.
¿Qué puede hacer México?
Jacques Coste, internacionalista, historiador y consultor político, considera que el Trump de ahora es más peligroso para México que en 2016 porque en su segunda eventual Presidencia enfrentaría menos contrapesos, menos ataduras institucionales y legales, y regresaría a la Casa Blanca más radicalizado.
“Si Trump gana las elecciones de noviembre, estaremos ante una película de terror. Las consecuencias para México pueden ser fatales”, explica.
La relación entre México y Estados Unidos es compleja en particular por problemas compartidos como migración, armas y fentanilo.
Durante la campaña, Trump y su compañero J.D. Vance no dudarán en apuntar contra México para atraer votos. A su vecino del sur lo responsabilizan de permitir el paso de migrantes irregulares, de quitarle empleos a Estados Unidos y de fabricar y traficar fentanilo, una sustancia que por el consumo en sobredosis, ha generado una crisis de salud pública y la muerte cada año de más de 100,000 estadounidenses.
Vamos a ver que el candidato republicano va a utilizar una retórica mucho más agresiva hacia México”
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha considerado los dichos de Trump como parte de la pasión electoral, sin embargo, le envió una carta para manifestar su rechazo a un eventual cierre de fronteras y para defender que los migrantes no son ni “invasores”, ni “maleantes”.
La virtual presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, ha optado por asegurar que esperará a ver quién gana las elecciones de noviembre, pero ha adelantado que México pedirá un trato de iguales.
“Ya nos tocará en su momento trabajar con el gobierno que vaya a quedar a partir de finales de enero que es cuando entraría… trabajar en temas que tienen que ver con seguridad, que tienen que ver con tráfico de drogas, pero también con tráfico de armas hacia México. Y esta visión que generó el presidente López Obrador de no subordinación, sino de trato entre iguales, en cambiar el Acuerdo de Mérida, por un tratado bicentenario, con un Acuerdo Bicentenario”, planteó este miércoles 24 de julio.
Aliados en Estados Unidos
Ante la radicalidad del discurso de Trump, expertos consideran que México necesita tener buenos interlocutores para negociar con el eventual gobierno, entre ellos, Marcelo Ebrard, futuro secretario de Economía, y Juan Ramón de la Fuente, nombrado como secretario de Relaciones Exteriores.
“Necesitamos establecer aliados en los Estados Unidos que nos permitan, poder negociar de manera mucho más contundente con el eventual gobierno de Trump. Necesitamos construir aliados. Es importante revisar y empezar a establecer mejores relaciones con los legisladores y en general también con los grupos de Estados Unidos que tienen interés en México y en las relaciones comerciales con México”, destaca Juan Manuel Ortega.
La primera afectación por el “efecto Trump” contra a México llegó esta semana, cuando el presidente ejecutivo de Tesla, Elon Musk, dijo que no tiene sentido invertir en México si el candidato republicano gana e impone fuertes aranceles a los vehículos producidos en México.
“Creo que debemos esperar a ver qué sucede en las elecciones. Trump ha prometido aranceles para los vehículos producidos en México. Si eso ocurre, no tendría sentido realizar una inversión significativa en el país”, expresó el también dueño de la plataforma X, quien hace un año había anunciado la construcción de una gigafábrica de Tesla en Santa Catarina, Nuevo León y una inversión de 5,000 millones de dólares.
El anuncio se da, solo unos días después de la Convención Republicana, donde Trump habló de la intención de poner aranceles y criticó a las fábricas de autos grandes que pretenden construirse en el país.
“Las fábricas que se se construyen en la frontera con México, regresarán a Estados Unidos”, dijo.
La migración como aliada
Una de las “fichas” que tiene México para negociar la gestión de la migración. México es país expulsor y de tránsito para migrantes quienes tienen como propósito llegar a Estados Unidos. Esa nación necesita al gobierno mexicano para contener el flujo que solo mostró una reducción con la pandemia de covid-19 y el cierre de la frontera, pero que ha tenido una tendencia a la alza y el establecimiento de récords en encuentros con migrantes.
De acuerdo con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados (CBP, por sus siglas en inglés), en 2023 se registró un nuevo récord de encuentros con migrantes en la frontera con México: 2.4 millones.
Al México ser clave en el control migratorio, la próxima presidenta tendrá que pedir al eventual gobierno del republicano que financie la estancia de los migrantes en territorio mexicano.
“El gobierno mexicano tendrá que tomar nota de dos cosas: ¿con qué medios va a atender a estas personas?, ¿qué le va a pedir o qué le debe exigir a Estados Unidos para que juntos financien la estancia de personas?”, comenta Urbano.
¿Y con Harris?
Aún nada está escrito por lo que de llegar Kamala Harris a la Presidencia de Estados Unidos, expertos ven una relación más tersa con México.
“Si la presidenta es Kamala Harris será mucho más sencillo para la futura presidenta de México Claudia Sheinbaum, establecer una relación más cordial, por varias razones. Primero porque hablan un idioma más similar, además de que las dos son mujeres y yo creo que las dos quieren la participación de las mujeres en la política, y porque el discurso de Kamala no es ver en los migrantes todos los problemas”, destaca Juan Manuel Ortega.
Donald Trump ve en los migrantes todos los problemas: seguridad y de drogas, sobre todo el asunto del fentanilo”.
