Hasta ahora es imposible asegurar que la información contenida en los sistemas de Certificados de Vacunación covid sea íntegra y confiable, de acuerdo con la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
“La Secretaría de Salud, SSA manifestó utilizar la CURP (Clave Única de Registro de Población) como identificador único de las personas que han recibido una vacuna y que, por ende, fueron registradas en el sistema CVCOVID, no obstante se identificó que 15.8% de los CURP no son válidos y 13.3% de personas en el sistema carecen de nombre, apellido, fecha de nacimiento, nacionalidad y sexo, por lo que se interpretan como dosis aplicadas sin que se pueda identificar a la persona receptora. No es posible asegurar que la información contenida en los sistemas CVCOVID sea íntegra y confiable”, se lee en el informe general del resultado de la fiscalización de la Cuenta Pública 2020, presentado por la ASF a la Cámara de Diputados.
Excélsior dio a conocer en octubre pasado que miles de mexicanos vivían un viacrucis por falta de certificado de vacunación covid debido a los que ciudadanos solicitaban a la Secretaría de Salud (Ssa) la corrección de sus certificados y la dependencia se declaraba incompetente para hacerlo, a pesar de que es la instancia competente para emitir y corregir los certificados de vacunación contra covid, conforme a los datos que se almacenan en la plataforma mivacuna.salud.gob.mx; tal y como se desprende del aviso de privacidad integral para la aplicación de la vacuna contra el virus SARS-CoV-2 al momento del registro.
En ese momento, Xavier Tello, médico cirujano y analista de políticas públicas de salud, expuso que “uno de los grandes problemas con la salud en México es la falta de infraestructura informática a la altura de las necesidades de una población y epidemiología como la de México. Seguimos siendo un país de paloteo. Faltan registros y censos de casi todas las enfermedades, pero lo que es imperdonable es que en medio de la peor pandemia en la historia moderna de México no existe un sistema transparente, robusto, bien planeado y pensado en el usuario para informar y dar certificados”.
Según la ASF, los Certificados de Vacunación covid también se elaboraron con equipos de cómputo obsoleto; sin embargo, la Secretaría de Salud se los rentó a la empresa Mainbit, S.A. de C.V. a precio de nuevos.
“Existieron 10 Convenios Modificatorios para extender la vigencia del contrato DGRMSG-DCC-S-049-2014 celebrado con Mainbit, S.A. de C.V. de 2017 a 2021, en los cuales se establece el mismo monto mensual por el arrendamiento de los equipos sin considerar la obsolescencia y depreciación de los mismos. Se realizó la revisión de una muestra 437 equipos integrados por 190 equipos de cómputo de escritorio para uso general y 170 equipos de cómputo portátiles, de los cuales se identificaron 156 equipos que no cumplen con las características requeridas en el Anexo Técnico del contrato, por los que se presumen pagos injustificados por mil 131.3 miles de pesos”.
En la auditoría hecha a la Ssa sobre el cumplimiento a tecnologías de información y comunicaciones se determinaron 45,354,565.62 pesos pendientes por aclarar.
También se detectó que en relación con el Contrato número DGRMSG-DCC-S-008-2018 celebrado con Uninet, S.A. de C.V., Consorcio Red Uno, S.A. de C.V., Triara.com, S.A. de C.V. y Scitum, S.A. de C.V., “se carece de cuentas de usuarios, perfiles y mecanismos de monitoreo y administración que permitan realizar una verificación y revisión de los componentes y servicios proporcionados por el prestador de servicios”.
Por último, Para el Contrato número DGRMSG-DCC-S-004-2018 y el contrato número DGRMSG-DCC-S-004-2020 celebrados con Grupo de Tecnología Cibernética, S.A. de C.V., “se identificaron 9 empresas que han tenido operaciones con Grupo de Tecnología Cibernética, S.A. de C.V., por un monto total de 55,204.1 miles de pesos, que se encuentran identificadas por el SAT como contribuyentes que han estado emitiendo comprobantes sin contar con los activos, personal, infraestructura o capacidad material, directa o indirectamente, para prestar los servicios o producir, comercializar o entregar los bienes que amparan tales comprobantes.
“Los datos revelados por la ASF en salud no sólo revelan un desastroso manejo de la salud, sino una consistente colección de malas decisiones tomadas, en el mejor de los casos, de forma improvisada.
“No sólo es la carencia de tecnología adecuada, sino una visible falta de profesionalismo y conocimiento en tomar decisiones”, dijo Tello.
Con información de Excelsior