Corea del Sur pasa de la ley marcial a las mociones de destitución
El Universal.-
Seúl.— El gobierno del presidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, retiró este miércoles temprano un “estado de ley marcial de emergencia” que impuso unas cinco horas antes durante una tensa noche de drama político en la que soldados rodearon la Asamblea Nacional y los legisladores aprobaron rechazar la ley marcial.
La policía y el personal militar fueron vistos abandonando los terrenos de la Asamblea Nacional luego de la votación bipartidista, y la declaratoria fue retirada formalmente cerca de las 4:30 de la madrugada, en una reunión del gabinete. Yoon impuso el estado de ley marcial el martes por la noche, al prometer eliminar las “fuerzas antiestatales” mientras lucha contra una oposición que controla el Parlamento y a la que acusa de simpatizar con la comunista Corea del Norte.
Menos de tres horas después, la Asamblea Nacional respondió y el líder legislativo, Woo Won Shik, declaró que la ley marcial era “inválida” y que los parlamentarios “protegerán la democracia con el pueblo”.
Tras levantar la medida, los principales partidos de oposición intensificaron su ofensiva contra el presidente e incluso propusieron que se lleve a cabo un procedimiento de destitución inmediato. Park Chan-dae, una figura importante del Partido Demócratico, pidió al presidente que renuncie. Según CNN, Park dijo que Yoon debe “dimitir inmediatamente” y “no puede evitar el cargo de traición” por su declaración de ley marcial. Hwang Un-ha, líder parlamentario, adelantó que “cada partido discutirá y propondrá rápidamente un proyecto de ley de impeachment al final de hoy”. El opositor Partido Demócratico dijo que iniciará un juicio político contra Yoon si no renuncia inmediatamente. El partido criticó su declaración de ley marcial, calificándola de acto de rebelión y motivo de juicio político.
La principal agrupación de sindicatos de Corea del Sur llamó a una “huelga general indefinida” hasta que dimita Yoon. Antes de levantarse la medida, Lee Jae-myung, líder del Partido Democrático, que es mayoría en el Parlamento de 300 escaños, dijo que sus legisladores permanecerían en el salón principal de la Asamblea Nacional hasta que Yoon levantara formalmente su orden. Woo aplaudió la rapidez con que los militares abandonaron la asamblea después de la votación.
Mientras anunciaba el retiro de la ley marcial, Yoon siguió criticando los intentos del Parlamento para someter a juicio político a importantes funcionarios del gobierno y fiscales, y los “actos sin escrúpulos de manipulación legislativa y presupuestaria que están paralizando las funciones del Estado”.
Yoon acusó a los legisladores de oposición de recortar “todos los presupuestos clave para las funciones fundamentales del país, como la lucha contra los delitos relacionados con las drogas y el mantenimiento de la seguridad pública”. También los acusó de ser “fuerzas antiestatales que intentan derrocar al régimen”. Aparentemente cientos de manifestantes se reunieron frente a la Asamblea Nacional, ondeando pancartas y pidiendo juicio político contra Yoon. Algunos manifestantes se enfrentaron con los soldados antes de la votación de los legisladores, pero no hubo informes inmediatos de heridos o daños materiales importantes.
En virtud de la Constitución de Corea del Sur, el presidente puede declarar la ley marcial durante “tiempos de guerra, situaciones similares a la guerra u otros estados de emergencia nacional comparables” que requieran el uso de la fuerza militar para mantener la paz y el orden. Es cuestionable si Corea del Sur se encuentra actualmente en tal estado. La Constitución también establece que el presidente debe cumplir cuando la Asamblea Nacional exige el levantamiento de la ley marcial con un voto mayoritario.
En Washington, la Casa Blanca dijo que Estados Unidos estaba “seriamente preocupado” por los hechos en Seúl.
Un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional indicó que el gobierno del presidente Joe Biden no fue notificado de antemano sobre el anuncio de la ley marcial y que estaba en contacto con las autoridades de Seúl.
Han Dong-hoon, líder del Partido del Poder Popular al que pertenece Yoon, señaló que la decisión de imponer la ley marcial había sido “errónea” y prometió “detenerla con el pueblo”. Yoon también ha desestimado los llamados a investigaciones independientes sobre escándalos de corrupción que involucran a su esposa y a altos funcionarios, respondiendo con fuertes reprimendas a sus rivales políticos. Sydney Seiler, presidente surcoreano en el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, argumentó que la medida fue simbólica para Yoon. “No tiene nada que perder”, dijo. Agencias