Crecen las protestas de docentes y empleados públicos contra Maduro en Venezuela
Miles de manifestantes marcharon pacíficamente por Caracas y distintos municipios del país para reclamar condiciones dignas de trabajo.
Infobae.- Docentes, jubilados y empleados de la Universidad Central de Venezuela (UCV) se unieron este jueves a las protestas en Caracas contra el régimen de Nicolás Maduro para exigir mejores salarios y condiciones laborales.
“Seguimos en la lucha por las reivindicaciones de todos los trabajadores. Esta lucha nos mantiene unidos”, escribió en su cuenta de Twitter el presidente de la Federación de Centros Universitarios (FCU) de la UCV, Yonnathan Carrillo.
Los manifestantes marcharon pacíficamente por la Autopista Francisco Fajardo con el apoyo de estudiantes y cantando consignas para pedir salarios en dólares. Y, según la prensa local, al llegar a la Defensoría del Pueblo en el centro de Caracas, un despliegue de agentes de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) les impidió avanzar con la movilización.
Por otra parte, de acuerdo con reportes en redes sociales, también hubo una gran manifestación de los gremios de educación, salud y administración pública en Tinaquillo, ciudad del estado Cojedes, y en Seboruco, municipio del estado Táchira, para exigir al gobierno nacional de Venezuela que haya mejoras salariales y laborales.
El miércoles miles de trabajadores públicos y jubilados de Venezuela marcharon en el centro de Caracas para exigir un aumento en los salarios y pensiones, cuyo monto mínimo establecido por el régimen chavista es de unos 7 dólares mensuales, mientras que una familia necesita 50 veces ese ingreso solo para comer.
“Vemos que hay una brecha inmensa entre el salario del sector privado con el del sector público. En estos momentos, el salario en el sector privado está entre 125 dólares y 150 mensuales, y en el caso nuestro (empleados públicos) el salario mínimo es la base y está a un poco más de 6 dolares”, dijo a la agencia de noticias EFE el secretario ejecutivo de la Federación Nacional de la Salud (Fetrasalud), Pablo Zambrano.
Aseguró que, aunque no están en paro ni pretenden convocarlo, los empleados públicos mantendrán las acciones de protesta en las próximas semanas. “Basta de esta política que simplemente lo que busca es pulverizar el salario de los trabajadores”, insistió Zambrano.
Luis Cano, un dirigente sindical que habló en nombre de los jubilados, reiteró que las pensiones, por las que trabajaron durante años, les son insuficientes a los adultos mayores para costear aspectos básicos como la alimentación y las medicinas. “Es muy difícil para un empleado venezolano acostarse todos los días y no saber qué va a hacer al día siguiente para poder comer, para poder comprar sus medicinas”, sentenció. En este sentido, pidió al régimen de Maduro permitir a los trabajadores vivir y envejecer “con dignidad”, a través de salarios y pensiones que se ajusten a la realidad venezolana.
Estimaciones privadas dieron cuenta de que, en el 2022, la inflación en Venezuela sobrepasó el 300 por ciento. La ONG Centro de Difusión del Conocimiento Económico (Cedice) precisó que fue del 310,33%, mientras que el Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF) la calculó en 305,7 por ciento. Las principales subas de precios se registraron en el sector de los alimentos, con aumentos de hasta 332,43 por ciento. En tanto, sólo durante el último mes del año, los precios de la vestimenta y el calzado sufrieron subas que alcanzaron el 57,8%, seguidos del equipamiento para el hogar, con el 55,8%: restaurantes y hoteles, con 55,4%; y esparcimiento, que aumentó un 53,9%, detalló el OVF.
Según el Observatorio, diciembre fue un mes clave ya que se registró una aceleración en la inflación, con una tasa del 37,2%, que representó un aumento de 15,3 puntos frente al 21,9% de noviembre. Esto supuso, además, el incremento más alto de los últimos 22 meses.
Por su parte, Cedice alertó sobre el aumento en el costo de vida -que se rige en dólares tras la dolarización de facto que sufrió el país-, que llegó al 27,01% a lo largo del año pasado. Esto se debió a que la inflación fue mayor a la depreciación de la ya muy golpeada moneda local -el bolívar- con respecto a la divisa estadounidense.