Aristegui.- Valeria Moy, directora del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), aseguró que la desaparición de siete órganos autónomos implica riesgos para la competitividad nacional.
Según el IMCO, la competitividad de México requiere garantizar la autonomía de las funciones reguladoras, evaluadoras y garantes de transparencia, por lo que es necesario que las decisiones técnicas de la nueva institución encargada de garantizar la competencia económica sean independientes del Ejecutivo.
“Aunque en la teoría las tareas se mantienen, es necesario que la nueva estructura administrativa garantice la autonomía de las decisiones que, por su naturaleza, deben ser técnicas e independientes de la agenda y los intereses del Poder Ejecutivo.”
Moy afirmó que entre los órganos afectados no solo se encuentra el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), sino también otros órganos fundamentales para la regulación y la competencia en el mercado, como la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y la Comisión Nacional de Hidrocarburos.
Asimismo, explicó que estos organismos tienen la función de “garantizar condiciones más o menos equitativas de mejores condiciones de mercado” y agregó que su papel incluye “tratar de evitar los monopolios, las prácticas monopólicas, tratar de beneficiar al final del día a los consumidores”.
Con la desaparición de estos organismos, sus funciones serán responsabilidad de las secretarías de la administración pública federal, lo que a decir del IMCO, provoca incertidumbre respecto a la efectividad de la medida.
“Me parece que es un retroceso en términos de acceso de información, de combatir los monopolios y las prácticas monopólicas”, afirmó Moy, proponiendo que esta situación podría tener un impacto negativo en la protección de los derechos de los consumidores.