El rotativo británico ha tomado la decisión en vista del contenido “a menudo perturbador” y “tóxico” publicado en la plataforma, que incluye teorías de la conspiración y comentarios racistas
El Periódico.- El prestigioso diario británico ‘The Guardian’ ha anunciado este miércoles que no publicará más contenido a través de sus cuentas oficiales en la red social X. Una decisión que el rotativo ha tomado en vista del contenido “a menudo perturbador” publicado en la plataforma, que incluye teorías de la conspiración alentadas por la extrema derecha y comentarios racistas. El contenido publicado en la red social, conocida anteriormente como Twitter, se ha radicalizado desde que el multimillonario Elon Musk compró la compañía en 2022 por un precio aproximado de 41.000 millones de euros.
El diario británico sostiene que las desventajas de mantener activas sus cuentas en X han superado los beneficios y añade que, a pesar de que hace tiempo que estaba valorando tomar esta decisión, ha sido la cobertura que la red social ha hecho de la campaña para las elecciones presidenciales en Estados Unidos lo que ha decantado definitivamente la balanza. “La campaña de las elecciones presidenciales estadounidenses solo sirvió para subrayar lo que hemos considerado durante mucho tiempo: que X es una plataforma mediática tóxica y que su propietario, Elon Musk, ha sido capaz de utilizar su influencia para moldear el discurso político”, ha señalado el rotativo.
Ninguna de las más de 80 cuentas oficiales del periódico –con un total de 27 millones de seguidores– publicará más contenido en esta red social, pero la empresa editora sí permitirá incorporar en sus informaciones mensajes publicados por otros usuarios o instituciones y también se podrán compartir artículos del periódico a través de otras cuentas, incluidas las de sus propios periodistas. Aún así, el objetivo es tener un vínculo cada vez menor con la plataforma. “Las redes sociales pueden ser una herramienta importante para las organizaciones de noticias y ayudarnos a llegar a nuevas audiencias pero, en este momento, X desempeña un papel menor en la promoción de nuestro trabajo”, ha recalcado la compañía.
Noticias falsas
Las decisiones tomadas por X desde su adquisición por parte de Musk han influido recientemente en el panorama social y político del Reino Unido. El magnate restableció las cuentas de agitadores de extrema derecha como Andrew Tate o Tommy Robinson, dos personajes condenados en varias ocasiones por la justicia cuyas cuentas en Twitter habían sido desactivadas por alentar discursos de odio. La plataforma tuvo un papel importante en la difusión del bulo sobre el origen del autor del asesinato de tres niñas en la localidad inglesa de Southport el pasado agosto, un episodio que desató una ola de violencia xenófoba en varias ciudades el país.
El propio Musk ha lanzado ataques directos contra el primer ministro, el laborista Keir Starmer, a quien acusó de estar liberando a “pedófilos” de las cárceles como parte de las medidas de emergencia que el Gobierno británico está tomando para resolver los problemas de sobrepoblación en los centros penitenciarios. El propietario de X también aseguró que la guerra civil era “inevitable” en el Reino Unido tras los incidentes de Southport y compartió noticias falsas sobre los supuestos planes de Starmer de enviar a los implicados en los disturbios a campos de detención en las islas Malvinas. Starmer no ha entrado directamente al trapo, pero sí ha planteado nuevas medidas legislativas para limitar la propagación de informaciones falsas en las redes sociales, entre ellas X.
La decisión del diario ‘The Guardian’ se suma a otras organizaciones que han abandonado la red social en los últimos meses, entre ellas el Royal National Orthopaedic Hospital –un hospital ortopédico vinculado al Servicio Nacional de Salud (NHS)– y la policía del Norte de Gales, que señaló el mes pasado que la plataforma “ya no es coherente con los valores” del cuerpo. Fuera del Reino Unido, otras empresas y organizaciones como la radio pública estadounidense NPR o el canal de televisión PBS también han anunciado decisiones parecidas.