Emmanuel Macron anuncia que Francia pondrá fin a su presencia militar y diplomática en Níger
En una entrevista con France 2, el presidente francés confirmó la terminación de la “cooperación militar” con el país africano, que consta de unas 1.500 tropas galas y que serán retiradas antes del final del año. Además, Macron también anuncio la retirada del embajador francés en Niamey.
France 24.- “Francia ha decidido retirar a su embajador y poner fin a su cooperación militar con Níger,”, mencionó el jefe de Estado francés, subrayando que la presencia de los más de mil soldados en territorio nigerino fue resultado de una solicitud del presidente derrocado, Mohammed Bazoum.
En agosto, la junta militar anuncio un plazo de 48 horas para que el embajador francés en Níger, Sylvain Itte, saliera del territorio. Al cumplirse la fecha, el representante del Estado francés en el país africano sería revocado de su inmunidad diplomática, por lo que la representación gala decidió recluirse en la embajada.
Por otro lado, Macron también dejó abierta la puerta de una futura cooperación entre los dos países, afirmando que su Gobierno estará “siempre disponible” para cooperar con los países del Sahel para combatir a los grupos yihadistas que amenazan con dañar la poca estabilidad estatal de naciones como Burkina Faso, Mali y Níger.
“Se acabó la Francia-África”
Las declaraciones del mandatario europeo también pusieron, al menos en el discurso, el punto final a la relación ‘tradicional’ entre Francia y el continente africano, en donde París ha buscado mantener su influencia geopolítica en la región.
“Hemos estado allí porque Níger nos lo pidió, Burkina Faso, Mali, para ayudarles a combatir el terrorismo en sus territorios. Hoy esos países han sido víctimas de golpes de Estado. Hoy mismo he hablado con el presidente Bazoum, que ahora está detenido porque llevaba a cabo reformas ambiciosas”, sentenció Macron.
El discurso de colonial ha sobresalido en la insurgencia en Níger. Desde el inicio del Golpe de Estado, decenas de ciudadanos afines a la nueva junta militar se han conglomerado en las afueras de la embajada francesa y bases militares galas para pedir la salida de todos los representantes estatales del antiguo poder colonial.
Quemando banderas de Francia, pero ondeando las de Rusia, de esa manera los habitantes de Niamey han expresado su inconformidad con la participación francesa, especialmente en el combate al terrorismo yihadista, en donde las víctimas desesperadas se han visto seducidas por otras opciones, como el Grupo Wagner, para asegurar la estabilidad de sus territorios.
“Se acabó la Francia-África, cuando hay golpes de Estado no intervenimos”, aseguró Emmanuel Macron, agregando que cualquier apoyo que su Gobierno pueda ofrecer va a estar a merced de la voluntad de los Gobiernos africanos.
Distanciamiento entre Francia y los países del Sahel
Níger, Mali y Burkina Faso han experimentado múltiples golpes de Estado en los últimos dos años; los tres no solo pueden ser relacionados por la cercanía de las naciones en donde tuvieron lugar, sino que también comparten el mismo discurso en contra de la intervención extranjera y el neocolonialismo europeo.
El 16 de septiembre, las tres naciones del Sahel firmaron un pacto de “defensa mutua”, en donde se comprometen a apoyarse entre sí en el caso de que una nación extranjera u organismo internacional decidiera intervenir militarmente en el territorio de cualquiera de los signatarios.
En julio pasado, la excolonia francesa experimentó un golpe de Estado comandado por una cúpula del ejército que se encontraba inconforme con el mandato de Bazoum, al que han retenido en la casa presidencial de Níger desde él inició de la insurrección.
Desde esa fecha, la junta militar que gobierna ‘de facto’ en el país no ha contado con reconocimiento internacional de algunos Gobiernos extranjeros, especialmente desde París, que han abogado en múltiples ocasiones por el restablecimiento del “orden constitucional”, así como negarse a establecer relaciones de cualquier tipo con los golpistas.
