Ante abandono de las autoridades, se unen para rescatar primaria en El Manantial
En el olvido, hacinados, en condiciones de pobreza y marginación, regresarán a clases presenciales los niños que estudian en la escuela primaria Jorge Obispo Hernández ubicada en la comunidad de El Manantial en la capital potosina.
Este plantel se encuentra en ruinas y sus condiciones no son las óptimas para recibir a los estudiantes.
Después de año y medio de la emergencia sanitaria por Covid-19, hay una mancha que ensombrece el panorama de casi 200 alumnos que recibirán instrucción educativa en este plantel, sus salones están destruidos, el mobiliario inservible, no cuentan con libros de texto gratuito ni material didáctico para el más elemental desarrollo educativo.
La comunidad de El Manantial se ubica cercana al complejo habitacional de Ciudad Satélite, pertenece a la delegación de Villa de pozos y debido a conflictos políticos, las autoridades municipales y estatales no se quieren hacer cargo de la institución, por ello el regreso a las aulas presenciales depende de directivos, padres de familia y de la sociedad civil.
Llegar hasta este lugar toma alrededor de media hora desde el municipio de Soledad de Graciano Sánchez, ahí habitan en su mayoría obreros de la zona industrial; cuando alguien se interna en la localidad se percata de las muchas necesidades que hay ahí, principalmente hay carencia de vivienda.
Las casas en su mayoría de adobe, son pequeñas, contarán con dos o tres habitaciones, algunas están techadas con lámina, las ventanas no son cubiertas por vidrios sino por pedazos de madera.
Muchas se encuentran en obra negra, por doquier hay escombro, tierra, y no existen áreas verdes para que los niños se desenvuelvan en un ambiente sano.
Para llegar a la primaria Jorge Obispo Hernández, hay que cruzar un terreno baldío, su longitud apenas es de 40 por 13 metros de largo. Son pocos los salones y diminutos, aún así están acostumbrados a recibir a más de 150 niños, desde su fundación hace 5 años.
En la zona cuentan con agua, luz, drenaje y hasta con televisión de paga, por lo que los principales problemas que tiene este plantel tienen que ver con el espacio y la rehabilitación, no sólo requieren ser salones más grandes si no contar con baños.
Ingresar a las aulas conmociona inmediatamente, no sólo porque se están cayendo sus paredes, sino porque la humedad ha acabado incrustada, la pintura se cae, no hay vidrios en las ventanas, en algunos lados las puertas están sobre puestas, algunas tienen candados viejos, no hay focos, el piso es de cemento gris, su pintura se está cayendo, sólo hay un baño dónde la taza esta sobre puesta – ni siquiera está completo-, no hay lavamanos.
Los mesabancos que están arrumbados, están sucios e inservibles, pueden representar todo un riesgo para cualquier menor, los maestros no tienen escritorio ni dónde sentarse.
El director de la institución educativa convoca generalmente a estudiantes normalistas para que sean ellos los maestros de estos niños ya que la Secretaría de Educación Pública, SEP, ni la Secretaría de Educación del Gobierno del Estado, SEGE, ni la dirección de Educación del municipio de San Luis Potosí, los apoyan porque no están completamente instituidos, sólo están apadrinados por otra escuela de Ciudad Satélite.
“Hay mucha necesidad, es como un lugar de nadie, esta paupérrimo, están tratando de levantar muros, ahorita es imposible que los niños se regresen a clases porque está inhabilitada”, dice la activista Cynthia Ann Christianson, que hoy junto con 50 familias emprendedoras se están organizando para realizar actividades altruistas y así poder reactivar a este centro escolar, se unen bajo estrategias denominadas como Colores y Crayones, con la intención de recaudar fondos y devolverle la dignidad que merece está institución educativa.
Hombres y mujeres han pedido ayuda desde semanas atrás para recolectar útiles escolares y libros de texto gratuito, porque ni siquiera cuentan con el material necesario para aprender.
“Si tienen servicios, pero necesitan poner baños, tienen un kínder que ha sido rehabilitado por los miembros de la comunidad, pero les falta la escuela primaria que urge, es una comunidad que está ahí, existe y tiene necesidades, el año pasado no hubo clase y está muy deteriorada, afortunadamente no está vandalizada. La comunidad es extremadamente pobre, son casitas miniaturas donde vemos familias enteras viviendo en casas de cartón, sin pavimento, tienen una terracería grandísima donde los niños juegan en medio de la nada”.
Este domingo 22 de agosto en el corredor Goytortua esquina con Manuel J. Clouthier (frente a Mueblerías Gala plaza Tangamanga) de 10:00 a 19:00 horas, se unen para llevar a cabo el Bazarcito Potosinas de Hoy, donde se estarán organizando para vender una gran variedad de productos y servicios de la mejor calidad en un ambiente familiar y totalmente seguro, donde se tomarán todas las medidas sanitarias y con lo recaudado poder comprarles cemento, pinturas y más “lo estamos haciendo como sociedad civil porque necesitan una educación digna, desde el domingo pasado recolectamos libros de la SEP, convocamos a todos y tuvimos mucha ayuda de la comunidad y hemos hecho paquetes para llevarles lo que podemos, queremos poderles comprar todo lo que podamos, hay una lista muy grande de lo que necesita la escuela”.
MujerESporti y Potosinas de Hoy, concluirán esta causa altruista. Dentro de las instalaciones se recibirán útiles escolares nuevos, libretas y libros de la Secretaría de Educación Pública, SEP.
Es por eso que hoy convocan a la comunidad a apoyar a sus expositores que son patrocinadores para así, poder rehabilitar las instalaciones de la Escuela Jorge Obispo Hernández de la comunidad El Manantial.
La participación de los asistentes se verá reflejada en la vida de muchos niños que necesitan una educación digna y que esperan ansiosos el regreso a clases “las necesidades muchas y nosotras como mujeres comprometidas con la sociedad queremos apoyarles para que por lo menos tengan una educación digna y que puedan cambiar el sentido a los niños de que pueden ser alguien y cambiar su realidad en un futuro”.
Algo que destaca a esta comunidad es que están muy unidos, pues aunque no tienen recursos se apoyan entre sí, incluso serán hombres y mujeres quienes construyen la escuela a partir de que cuenten con el material necesario “tenemos un grupo de voluntariado El potosinas de hoy donde hemos recibido mesabancos escritorios pintura y en la recolección del fin de semana pasado, logramos captar recursos para comprar algo de block pero falta aún mucho para meter el resto de lo que necesita”.
Vale la pena ayudar a esta institución educativa pues esta organización civil refiere que los niños saben responder, ya que muchos de ellos han ganado concursos y saben aprovechar su educación, motivo que debe sumar para que la población potosina se desprenda de sus bolsillos y este próximo domingo acude al llamado de MujerEsporti y Potosinas de Hoy, para devolverle la vida no sólo a las paredes que albergan este centro escolar, sino para darles esperanza a quienes son el futuro de nuestro Estado.