El pasado miércoles el Presidente aseveró que los estudiantes habrían adquirido drogas en una zona controlada por una banda rival
Infobae.- Luego de que el presidente Andrés Manuel López Obrador criminalizara a los jóvenes que fueron asesinados en Celaya al aseverar que el caso estaba relacionado con la compra-venta de drogas, este lunes fueron revelados los resultados de los exámenes toxicológicos practicados a las víctimas, mismos que dieron negativo.
Ante estos hechos, Fabiola Mateos, madre de dos de los seis estudiantes asesinados el pasado 3 de diciembre, exigió a López Obrador que “rectifique”, aclare sus dichos hechos en la “mañanera” y ofrezca una disculpa por criminalizarlos.
“El señor habló sin elementos, los revictimizó, no entiendo cómo la máxima autoridad de esta nación hace eso, con todos los elementos en la mano puedo decir que se les hizo el examen toxicológico a mis hijos y al resto de los jóvenes que desgraciadamente perdieron la vida y salió negativo, ninguno de los jóvenes que iba en ese carro tiene rastros de que en algún momento hayan consumido algún tipo de droga”, dijo en entrevista con Azucena Uresti.
La madre de Jesús Virgilio y Fabián Orozco Mateos ―estudiantes de la Universidad Latina de México― añadió que ella y los padres de los otro jóvenes masacrados esperaban tener apoyo de las autoridades con las investigaciones o siquiera el pésame, sin embargo, sólo obtuvieron juicios de valor emitidos por el Presidente.
“Es algo muy doloroso para mí y para los papás que el presidente primero no haya dado el pésame (…) lejos de darnos un pésame, nos hace un juicio, dice que a nuestros hijos les faltaba amor cuando el señor no nos conoce. Ellos estaban cuidados, se les dio el amor suficiente, educación, se les dio todo lo que estaba en nuestras manos, espero que se rectifique”, señaló.
En otra entrevista con Latinus, la también tía de Pedro Francisco Mateos Puente (otra de las víctimas) subrayó que si sus hijos y el resto de los chicos que los acompañaban hubieran sido consumidores entonces nunca se hubieran esforzado tanto para estudiar una carrera tan difícil y demandante como lo es Medicina.
La tarde del domingo 3 de diciembre los cuerpos de José Eduardo Freire Ortega, Bryan Jesús Amoles Gasca, los hermanos Jesús Virgilio y Fabián Orozco Mateos, y su primo Pedro Francisco Mateos Puente fueron hallados en un camino de terracería que va a la comunidad de Santiago de la Cruz. Al día siguiente, Giovanni Juárez Figueroa, la sexta víctima, fue encontrado sobre el mismo camino, metros más adelante la mañana del lunes.
Las víctimas identificadas asistían a la Universidad Latina de México, en donde cursaban diversas especialidades: Jesús Virgilio y Fabián eran estudiantes de Cirugía y Fase I; su primo Pedro Francisco cursaba Pediatría; en tanto, José Eduardo se encontraba estudiando Pediatría y Brayan se especializaba en Cirugía. Dos de ellos se iban a graduar de la ULM en el 2024.
Giovanni tenía 18 años y estudiaba en el Instituto Vicente Guerrero (INSVIG); era amigo de los hermanos Jesús Virgilio y Fabián Orozco Mateos, así como su primo Pedro Francisco Mateos Puente.
Qué dijo AMLO sobre el caso
Imagina qué es uno de tus hijos, y el corruptor te dice esto:
AMLO liga asesinato de estudiantes en Celaya por la compra de drogas. pic.twitter.com/jbNvLHf659
— CapiApril (@CapiApril_) December 8, 2023
Fue en la conferencia matutina del miércoles 6 de diciembre que AMLO se encontraba hablando sobre cómo evitar el consumo de narcóticos, por lo que retomó el caso de los jóvenes asesinados el fin de semana en Guanajuato.
Según explicó, los jóvenes de la ULM viajaron de Guanajuato a Querétaro para ir a una fiesta y en su retorno habrían sido víctimas de asesinato, indicando que los estudiantes habrían adquirido drogas en una zona controlada por una banda rival.
“Lo que sucedió es que jóvenes estudiantes, incluso de medicina, fueron a unas fiestas a Querétaro. Pasaron a algún lugar de Villagrán a comprar droga y ahí los asesinaron. Esto es todavía hipotético, todavía no concluye la investigación”, declaró el mandatario.
Los comentarios del presidente López Obrador provocaron indignación. El alcalde de Celaya, Javier Mendoza, reviró al mandatario federal y dijo: “No se vale revictimizar a los muchachos, no se vale que quieran meter cortinas de humo (…) No hay ningún indicio de que los jóvenes estuvieran involucrados con temas de droga. Es muy triste que (AMLO) haga ese tipo de comentarios”.
FGE también contradice a AMLO
Al día siguiente, el titular de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Guanajuato, Carlos Zamarripa, negó la versión y dio más detalles sobre las investigaciones. Precisó que los cinco estudiantes de la ULM y el alumno del INSVIG se encontraban en el balneario Arreguín de Abajo cuando fueron levantados por el grupo criminal.
En entrevista con un medio local, Zamarripa detalló que los indicios arrojan que las víctimas se encontraban en Querétaro para asistir a una fiesta y luego viajaron al balneario, ubicado en los límites del municipio queretano de Celaya, en donde presuntamente sujetos armados plagiaron de su libertad a los jóvenes.
Precisó que todos fueron llevados a bordo de diversos vehículos y más tarde fueron torturados y asesinados.
“Estos cinco jóvenes universitarios eran eso, unos jóvenes estudiantes universitarios que estaban en un área de recreación, haciendo lo que hace uno en un centro de recreación de esta naturaleza y que por supuesto no existía ningún motivo, hasta lo que nosotros tenemos de investigación, para que les aconteciera lo que finalmente pasó, que les arrebataron la vida”, subrayó el fiscal, contrariando las afirmaciones que hizo el mandatario federal.
Señaló que la investigación cada día está más robusta, no obstante, no pudo dar más detalles por la naturaleza del caso, pero aseveró que AMLO “tuvo una tarjeta informativa que alguien le pudo haber pasado y no es del todo certera”. Tras precisar que las seis víctimas eran “gente de bien”, añadió que la línea de investigación que persiguen dista mucho del tema de consumo de drogas.