El Financiero.- “En México hay racismo, ¿lo puedes ver?”. La pregunta es de la organización Educación contra el racismo, o RacismoMX. Imposible no mirarlo, pero lo perdemos de vista porque siempre está frente nuestro. El racismo está en todos lados, lo reproducimos en todos los ámbitos de nuestras vidas, como el laboral.
A continuación, algunas datos y testimonios que comprueban la afirmación de RacismoMX: en México hay racismo.
El 81% de las personas que tienen entre 30 y 39 años de edad y no hablan alguna de las 68 lenguas indígenas del país tiene participación económica en el país, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Es decir, tiene un empleo, una empresa o están buscando trabajo. En cambio, para la población de habla indígena ésta cae a 71% entre las personas de entre 30 y 34 años de edad y a 72% entre las que tienen entre 35 y 39 años.
Según el Inegi, el 82% de las personas afromexicanas aportan a la economía del país. Sin embargo, si comparamos a la población no económicamente activa que se identifica como afromexicana, observamos que el 11% no trabaja porque se dedica a estudiar. Mientras que el 13% de las personas no afrodescendientes se pueden dedicar completamente a sus estudios.
Además, de acuerdo con datos de la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami), la población trabajadora indígena mexicana gana 18% menos que el resto de las personas. Es decir, por cada 100 pesos que el mercado laboral le paga a quienes no pertenecen a uno de los 68 pueblos originarios, a quienes sí provienen de ese sector social les retribuye unos 82 pesos por hacer la misma actividad.
¿Qué pasa si analizamos la participación económica de las infancias y las adolescencias? Las tasas se revierten. Las niñas, niños y adolescentes no hablantes de lengua indígena tienen menos probabilidad de trabajar, pero si se trata de población infantil indígena, es mucho más posible que estén trabajando.
La tasa de participación económica de las niñas y niños de entre 12 y 14 años de edad hablantes de español o algún otro idioma que no es considerado indígena es de 12 por ciento. Pero es de 26% para las y los menores que sí hablan lenguas indígenas del mismo grupo de edad.
Las cifras del Inegi muestran que el 34% de las y los adolescentes de entre 15 y 19 años no hablante de lengua indígena trabajan. Sin embargo, casi la mitad de las adolescencias indígenas de esas mismas edades tiene trabajo, es decir, el 48 por ciento.
Trato desigual a migrantes racializados
En el campo laboral existen “restricciones, distinciones y obstáculos injustificados, desproporcionados y arbitrarios basados en marcadores étnico-raciales contra personas migrantes negras, morenas y afrodescendientes”, señala el Observatorio de Racismo en México y Centroamérica, de RacismoMX.
Para la investigación Como me ven me tratan, perfilamiento racial en la migración, el observatorio habló con varias personas migrantes. Una de ellas comentó que acudió a dos empresas en México que tenían vacantes anunciadas. “En una me dijo (sic) que ellos sabían que yo tenía documentos, pero no emplean a extranjeros. La otra compañía, ‘G’, me dijeron (sic) lo mismo, que no dan empleos a extranjeros”, señala el testimonio.
“Eso fue lo que me dijeron, pero lo que yo he escuchado es que hay gente de Honduras y Guatemala trabajando en esa compañía, eso quiere decir que no quieren personas negras (…) Sí te sientes mal porque es un tipo de discriminación, no te sientes cómodo, te sientes muy incómodo aquí porque no puedes ser lo que tú quieres. Por ejemplo, donde yo trabajo ahorita, tengo mucha experiencia, pero a mí me pagan menos que al resto. Sí, porque sí no lo acepto nadie me va a dar trabajo, soy negro”.
Según el Inegi, el 80% de las personas migrantes documentadas de entre 30 y 39 años de edad tienen participación económica en el país.
Opciones para hackear al racismo
En 2022, RacismoMX lanzó la Bolsa de trabajo para talento racializado. Es una base de datos de “personas prietas, racializadas, morenas, afrodescendientes e indígenas” de diferentes disciplinas, con diferentes habilidades y experiencias que pueden ser las candidatas perfectas para el puesto que algún centro laboral necesite cubrir.
La información está disponible para empresas aliadas. Las compañías que aún no lo sean, pueden contactar a RacismoMX para ser parte de la iniciativa y beneficiarse con personal diverso.
Por otro lado, si alguna persona racializada ha sido discriminada en su centro laboral, puede denunciarlo al Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) o al organismo estatal correspondiente. También en alguna de las procuradurías de la defensa del trabajo.
Para esto, RacismoMX recomienda “tener el nombre de la persona agresora, el puesto que desempeña y el lugar de trabajo donde se llevó a cabo la conducta discriminatoria”. También les ayudará “apuntar los hechos, mientras más detallada sea la descripción de la conducta discriminatoria mejor te pueden asesorar los organismos correspondientes y mayor éxito podrá tener tu queja”.
Para ello, hay que procurar anotar la fecha exacta y la hora aproximada en que se llevaron a cabo los hechos. Si se prolongaron por varios días, “asegúrate de tener un cronograma lo más detallado posible de todos los eventos discriminatorios”. Además, si es posible, obtén el contacto “de personas que hayan sido testigos de los hechos discriminatorios, serán estas personas quienes puedan ayudarte a hacer la denuncia o queja”.