Fairplay, la era de las finanzas virtuales
FORBES – Fairplay es una plataforma tecnológica que habilita productos financieros para empresas de e-commerce.
• Equipo: Manolo Atala y Andrew James Devlyn
• Fundación: 2019.
• Facturación 2020: 6.5 mdp
• Estimado 2021: 35 mdp
• Empleados: 25
La búsqueda de un modelo de negocio innovador selló el camino de Manolo Atala. En 2019, el entonces socio y director de operaciones de la firma de capital de riesgo Mountain Nazca se dio a la tarea de encontrar una idea ganadora para emprender, la cual fue hallada y se basa en financiar a las empresas del comercio electrónico.
El siguiente paso fue buscar al emprendedor ideal para poner en marcha el proyecto. Así fue como eligió a su amigo de la adolescencia Andrew James Devlyn, por la experiencia financiera que tenía, pero no quiso dejarlo solo en la aventura de emprender y él mismo se sumó a la empresa de la que es cofundador: Fairplay.
Fairplay es una plataforma tecnológica que habilita productos financieros para empresas de e-commerce. La idea del emprendimiento es atender las necesidades inversión de las compañías en inventarios (materia prima) y en marketing online, para garantizar la adquisición de clientes.
“Los productos financieros en el mercado están diseñados para muchas cosas, pero no para cubrir estas dos cosas [inventarios y marketing] en un nicho tan importante como es el e-commerce”, explica Manolo Atala, cofundador y CEO de Fairplay.
Canadá y algunos países de Europa cuentan con empresas que tienen un modelo de negocio como el de Fairplay, pero ni en México ni en Latinoamérica hay una propuesta similar, dice Atala.
“Nosotros queremos ser los primeros [participantes] y ojalá los más importantes [en el mercado mexicano]”, afirma el emprendedor.
La experiencia profesional de los dos emprendedores es crucial para el éxito de los proyectos financiados, ya que la plataforma intenta no sólo invertir, sino ofrecer un espacio que apoye a sus clientes a gestionar el negocio de una mejor manera, es decir, a través de la información recabada ofrecer las mejores prácticas en la industria.
Manolo Atala estudió música y sus primeros pasos profesionales se encontraban lejos de la consultoría o de los números propios de un inversionista. Antes de ingresar a Mountain Nazca, el mexicano tuvo la oportunidad de dirigir la operación de Groupon México, montó su propia consultora y fue inversionista y director de Cornershop en México, entre otros encargos.
En el caso de su socio, Andrew James dedicó todos sus esfuerzos durante varios años en el negocio familiar: Ópticas Devlyn. Su experiencia le permitió tener conocimientos técnicos sobre el comercio electrónico y fundar una agencia de comercio digital en Latinoamérica.
Los dos emprendedores creen que el siguiente paso de Fairplay será enseñar a las empresas a tener una mejor gestión de sus inventarios de forma totalmente gratuita y, por último, ofrecer información para gestionar el flujo de caja a través de una administración eficiente.
La mayor parte de las compañías que son clientes de Fairplay apenas suman dos años de existencia en el mercado. La empresa utiliza algoritmos para predecir las ventas futuras que puede tener la empresa y así definir el monto de inversión que requieren, mientras la empresa cobra una tasa fija por servicio financiero.
En este momento, Fairplay ya cuenta con 45 empresas que han sido financiadas, entre las cuales se encuentran firmas pequeñas y medianas. “Tenemos un espectro de compañías a las que les estamos agregando valor”.
Los planes de crecimiento no se detienen. Colombia y Chile se encuentran dentro de los países en donde los emprendedores esperan llegar con la operación de la empresa en un mediano plazo.
El principal reto para el modelo de negocio es concretar un proceso de educación sobre los productos financieros en el mercado, ya que en Latinoamérica es uno de los grandes pendientes por trabajar.
Por otro lado, la pandemia ha acelerado el negocio de los emprendimientos enfocados en comercio electrónico. “Todo está muy influenciado por lo que ocurre en esta coyuntura. No conocemos otra cosa que no sea pandemia en Fairplay”.