El cetáceo sería quien está frente a los ataques; su historia llevó a los investigadores a revelar el porqué de la actitud.
El Universal.- En Gibraltar, el pasado 2 de mayo, un yate llamado Bavaria 46 fue embestido por varias orcas. El bote se encontraba navegando cerca de Tánger cerca de Marruecos.
La orca que comanda a los depredadores es llamada por los investigadores del hecho como Gladis y los científicos aseguran que el comportamiento de este mamífero se debe a que en el pasado el animal fue víctima de pescadores ilegales que pensaban cazarla.
Gladis quedó “traumatizada” al chocar con un bote y se sospecha que pudo haber estado atrapada por las redes de estos pescadores. Lo más extraño del caso es que este comportamiento está siendo copiado por otras orcas que habitan el lugar, lo que causó varios daños en botes y barcos que frecuentan estas costas.
Alertan por posible aumento de conductas agresivas
La persona que estaba dirigiendo el bote, Greg Blackburn, de Leeds ya se encontraba presentando dificultades en la navegación por los fuertes vientos, por lo que al ser embestido por las orcas manifestó: “Pensé ‘oh cielos’ cuando los vi. Después de leer los informes y saber lo que ha estado pasando, pensé que ahora estábamos en un viaje”. El bote tuvo varios daños y regresó con dificultad al puerto.
En noviembre de 2022, un bote en las costas de Portugal también fue atacado por el grupo de ballenas. Esta vez el barco llevaba tripulación francesa a bordo y fue hundido por las grietas que las orcas causaron en el casco.
Según informes de la costa ibérica, los primeros ataques iniciaron en mayo de 2020 y en ese año las autoridades españolas prohibieron la navegación en el lugar, luego de presentarse más de 20 ataques de orcas.