El gobierno decretó tres días de duelo nacional, mientras el ministro de Transporte presentó su renuncia horas después del accidente.
El presidente del sindicato de maquinistas OSE, Kostas Genidounias, denunció lo que calificó como falta de seguridad en la línea, que une a las dos principales ciudades de Grecia.
“Toda (la señalización) está hecha manualmente. Desde el año 2000 los sistemas no funcionan”, declaró a la televisión ERT.
Una red con problemas
Previamente, aseguró a AFP que “ningún sistema de seguridad, de telemando y semáforos funcionaban“.
“Era un tren lleno de estudiantes, de jóvenes de una veintena de años”, declaró a periodistas Costas Bargiotas, médico del hospital de Lárisa. “Es realmente impactante ver los vagones arrugados como si fueran de papel”, agregó.
“Es una pesadilla lo que viví (…) Todavía estoy temblando”, declaró a AFP un pasajero, Angelos de 22 años, en el sitio del accidente.
“Sentimos la colisión como un gran terremoto“, agregó. “Felizmente, estábamos en el penúltimo vagón y tuvimos suerte de salir vivos“. En el rescate participan unas 500 personas, según un portavoz del gobierno.
Huelga y protestas tras choque
Mientras que los fallecidos por el choque de trenes en Grecia han aumentado, los sindicatos de empleados ferroviarios han anunciado una huelga de 24 horas este jueves por el deterioro del sector y para criticar que el único detenido sea un empleado de la empresa estatal de trenes.
Los trabajadores en ferrocarriles y en el metro de Atenas han anunciado una huelga de 24 horas este jueves denunciando “la crónica falta de respeto mostrada por los diferentes Gobiernos” al sector ferroviario, lo que, según denuncian, “condujo al trágico resultado” del martes.
El malestar ciudadano, sin embargo, se refleja también en una protesta que se produjo anoche afuera de las oficinas de Hellenic Train en Atenas, la empresa que opera los ferrocarriles en Grecia.
Centenares de manifestantes acusaron al Gobierno por la privatización de la compañía en 2017, mientras que también hubo distintos altercados cuando un grupo tiró cócteles molotov a la Policía, que respondió con gases lacrimógenos.