Durante este año, San Luis Potosí, vio de cerca el rostro de la inseguridad e impunidad, un grupo delictivo casi a finales de este año, llegó para asentarse en el territorio potosino, las balaceras, robos y asaltos estuvieron a la orden del día, sin que ningún gobierno pudiera controlar nuestros grandes problemas.
Es así, que la percepción de inseguridad de los potosinos según las encuestas divulgadas por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, (Inegi), nos hacían vernos rebasadas por un 80 por ciento, es decir 8 de cada 10 potosinos se sentían intranquilos de andar en la calle, cajeros, centros comerciales, bancos y negocios. Lo peor de todo es que no hubo policías suficientes para atender a todos los potosinos, según denunciaba Rubén Guajardo Barrera, presidente de la Comisión de Seguridad del Congreso del Estado.
Las manifestaciones se hicieron sentir a lo largo y ancho del territorio potosino, los Policías Ministeriales, pusieron la muestra al encabezar sendas protestas en las principales avenidas y calles de la ciudad, argumentando que aunque cuidaban de la ciudadanía no contaban con sueldos y prestaciones dignas, según señalaba la líder de los que bloquearon por varios días la carretera 57, Adriana Moya.
Venta o consumo de drogas, disparos frecuentes con armas, descuartizados, bandas violentas o pandillerismo, tomas irregulares de luz, homicidios dolosos y feminicios, fueron el pan nuestro de este 2021.
