Lady Gaga revive a su alter ego ‘Mother Monster’ en Coachella

En su presentación realizó una obra de teatro que se dividió en seis actos, desglosando una nueva era sin dejar atrás las otras que la catapultaron a la fama.
ABC.- Lady Gaga interpretó una versión diferente de ‘Mother Monster’ con una actuación en la que mezcló éxitos de su nuevo álbum, ‘Mayhem’, en Coachella.
La estrella estadounidense encabezó este viernes el cartel de la primera jornada del festival más grande de EU, que se celebra en la ciudad de Indio (California).
En la cual realizó una obra de teatro que se dividió en seis actos, contando el final, en los que fue desglosando el inicio de una nueva era sin dejar atrás las otras que la catapultaron a la fama.
A través de una inédita historia, que ya venía advertida que sería sangrienta, al dar inicio al concierto con ‘Bloody Mary’, y posada sobre un largo vestido rojo, la cantante avisaba de que no se trataba de un viaje cualquiera, sino más bien de una transición en la que volvió a su pasado.
En un ‘show’ cargado de dramatismo, muchos suspiros para crear suspenso, y el retorno de Gaga de repente revelaba la sorpresa y se encontraba cara a cara con su ‘alter ego’ de ‘Bad Romance’.
Tras una lucha entre ambas, simulada como si fuese una partida de ajedrez bailada al ritmo de ‘Poker Face’, la artista mata a golpes a la dama blanca que protagoniza el videoclip de la canción principal del álbum ‘The Fame Monster’, su era más gótica.
Tras un ritual de entierro, Gaga yace junto al cadáver de quien simula ser su antigua yo, y comienza a emerger de sus cenizas al ritmo de ‘Perfect Celebrity’ para luego dar paso a una de las canciones que marcaron una era en su repertorio: ‘Alejandro’.
La estrella mostró a lo largo del show, además, su faceta polifacética: tocó la batería ‘Killer’, la guitarra con ‘Garden of Eden’ y se puso frente al piano para las baladas ‘How Bad Do U Want Me’ y ‘Shallow’, además de bailar las coreografías de ‘Judas’ o ‘Born This Way’.
Y tras una operación, Gaga se “reconstruye”: “Los monstruos nunca mueren”, concluyó, mientras empiezan a sonar los primeros acordes de ‘Bad Romance’, con la que cierra un ciclo que duró 1 hora y 45 minutos. Sin embargo, la presentación que también sorprendió a todos los asistentes fue la de Benson Boone.
Todos esperaban su mítica voltereta mortal hacia atrás con ‘Beautiful Things’, pero lo que muchos no imaginaron es que el mismísimo Brian May, miembro de la legendaria banda británica Queen, aparecería por sorpresa casi al final de su actuación para interpretar junto al cantante ‘Bohemian Rhapsody’.
Tampoco defraudó el dúo del momento, los argentinos Ca7riel y Paco Amoroso, quienes debutaron en el festival con un repertorio que hizo saltar a la grada mientras ellos comenzaban el espectáculo sentados interpretando ‘Dumbai’.
Por su parte, la cantante surcoreana LISA volvía a subirse a un escenario de Coachella, aunque esta vez como solista, interpretando algunos de sus temas más sonados, como ‘Kiss Me’. EFE