Líderes brasileños elogian una caída del 34% en la tasa de deforestación en la Amazonía
NPR.- El gobierno nacional de Brasil anunció la semana pasada que la tasa de deforestación en la Amazonía se redujo en un 34% en los primeros seis meses de este año en comparación con el mismo período del año pasado.
La disminución coincidió con la nueva administración del presidente izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva, quien asumió el cargo en enero y se comprometió a proteger la selva tropical y revertir la creciente deforestación.
El ascenso de Da Silva sigue al controvertido mandato del presidente de extrema derecha Jair Bolsonaro, quien perdió su candidatura para otro mandato y luego se le impidió postularse para el cargo nuevamente hasta 2030 por abuso de poder durante las elecciones del año pasado.
Mientras era presidente, Bolsonaro eliminó algunas de las protecciones ambientales de Brasil y alentó la producción agrícola y la minería en la Amazonía.
La deforestación ilegal a menudo es causada por personas que toman tierras y las arrasan para venderlas para el cultivo de soja y el pastoreo de ganado . Una pequeña minoría de agricultores es responsable de la mayor parte de la destrucción .
En 2021, Brasil registró su tasa anual de deforestación más alta en 15 años, con unas 5100 millas cuadradas de selva tropical perdida.
Los funcionarios del gobierno dicen que eso está cambiando con da Silva.
“El esfuerzo para revertir la curva de crecimiento de la deforestación fue exitoso”, dijo el viernes João Paulo Capobianco, secretario de control de la deforestación, en una conferencia de prensa.
La ministra de Medio Ambiente, Marina Silva, agregó que ya no habría “complicidad con la criminalidad” y dijo que un aumento en las inspecciones y embargos también ayudó a frenar el reciente crecimiento de la deforestación en la Amazonía.
Las multas emitidas por el Instituto Brasileño de Medio Ambiente y Recursos Naturales Renovables aumentaron un 116 % en los primeros seis meses de este año, y los embargos sobre el uso de áreas deforestadas ilegalmente crecieron un 111 %, según mostraron los datos.
Aún así, los funcionarios reconocieron que, si bien la deforestación se ha desacelerado, no se ha detenido: de enero a junio de este año, se talaron más de 1,000 millas cuadradas de bosque. Y dijeron que la próxima estación seca puede producir incendios forestales destructivos que podrían poner en peligro aún más la selva tropical.
