Llaman a replantear la Alerta de Violencia de Género

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Blakely Morales

Con tan solo 3 sentencias, para 27 casos de feminicidio reconocidos por la autoridad en San Luis Potosí, durante el 2021; el crimen de odio extremo contra las mujeres se encuentra empañado por el halo de la impunidad. 

Para el abogado José Mario de la Garza Marroquín, presidente de la Fundación Renace capítulo San Luis Potosí, es necesario que se modifiquen los esquemas de acción, para que, de acuerdo a los estándares internacionales, las investigaciones en torno a los asesinatos de mujeres con componente de género, se realicen en periodos más cortos de tiempo, de tres a cuatro días, para entonces no permitir que se contaminen las pruebas.

Por hablar de un ejemplo reciente, por ejemplo, el caso de Nayeli Alfaro Silva, cimbró a la sociedad potosina el pasado mes de marzo; en él, la Fiscalía estatal tardó casi dos semanas en localizar el cuerpo de la víctima, y prácticamente un mes en detener al principal sospechoso, quien ahora está en prisión preventiva, y desde la semana pasada cuenta con una vinculación a proceso por los delitos de secuestro contra particulares y por feminicidio.

Pero en principio la Fiscalía había iniciado una carpeta de investigación en contra del ahora imputado, por primer delito, el de secuestro, pero la juez de la causa determinó que la forma en la que el ahora presunto culpable, desechó el cadáver de Nayeli, fue motivo para que también se le achacase el delito de feminicidio. 

Esto ocurrió hasta en la audiencia celebrada la semana pasada en los juzgados orales del centro de justicia penal de La Pila, y a pesar de que la Fiscalía tuvo en todo momento, indicios de que Nayeli había sido ultrajada por su propia pareja.

Sobre este contexto que se replica al menos once veces diariamente en nuestro país, para los abogados penalistas y constitucionalistas, José Mario de la Garza y Miguel Carbonell, el sistema de justicia penal mexicano carece de los recursos técnicos y tecnológicos para la generación de evidencia que permita procesar con prontitud los casos más graves, en los que se requiere toda la inteligencia para también alcanzar un mayor número de sentencias, y disminuir la impunidad.

De la Garza y Carbonell estuvieron este lunes, compartiendo en un conversatorio en la Facultad de Derecho de la UASLP, reflexiones en torno al Sistema de Justicia Penal en nuestro país; en el que abundaron además, sobre la necesidad de quienes ejercen la abogacía, de alejarse de la visión leguleya. 

El también investigador de la UNAM y columnista de El Universal, dijo que las y los abogados deben ser partícipes de la pacificación del país, y recurrir cada vez más a medios alternativos de resolución de conflictos, cómo ahora lo permite el sistema penal acusatorio.

Al abordar las deficiencias del aparato de justicia que ha impedido que existan más sentencias para las víctimas de feminicidio, el abogado Miguel Carbonell refirió por ejemplo, que en otro delito que va aparejado con el feminicidio, que es el de la desaparición forzada de personas, de 47 mil casos reportados desde el inicio de la actual administración federal, apenas ha habido 37 sentencias.

También sobre el tema, el abogado José Mario de la Garza, sugirió replantear la Alerta de Violencia de Género: “Hay que reestructurar la Alerta de Género, ahí hay un gran tema, nosotros inclusive en Renace tenemos un juicio de amparo que promovimos hace algún tiempo ya, por considerar que el protocolo de la Alerta de Género, con todo lo que se tiene que hacer, no acaba resultando en un mecanismo de protección eficiente, ni en un mecanismo de investigación eficiente”.

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