Macron acusado de autoritarismo tras amenaza de cortar redes sociales

Élysée insiste en que el presidente francés no aboga por un apagón general mientras los ministros dicen que los alborotadores usan plataformas para organizar la violencia

The Guardian.- Emmanuel Macron enfrenta una reacción violenta después de amenazar con cortar las redes sociales como una forma de detener la propagación de la violencia durante los períodos de disturbios.

Los funcionarios del Elíseo y los ministros del gobierno respondieron el miércoles insistiendo en que el presidente no estaba amenazando con un “apagón general”, sino con la suspensión “ocasional y temporal” de las plataformas

Los comentarios del presidente se produjeron cuando los ministros culparon a los jóvenes que usan las redes sociales como Snapchat y TikTok por organizar y alentar disturbios y violencia después de que un adolescente murió a tiros durante una parada de tráfico policial en un suburbio de París la semana pasada.

“Necesitamos pensar en cómo los jóvenes usan las redes sociales, en la familia, en la escuela, las interdicciones que debe haber… y cuando las cosas se salgan de control quizás tengamos que regularlas o cortarlas”, dijo Macron en una reunión de más de 250 alcaldes, cuyos municipios fueron golpeados por la violencia, el martes.

“Sobre todo, no deberíamos hacer esto en el calor del momento y me complace que no tuviéramos que hacerlo. Pero creo que es un debate real que debemos tener a la luz del día”, dijo Macron a los alcaldes en un video obtenido por la televisión BFM.

Los críticos dijeron que considerar tales medidas pondría a Francia junto a países autoritarios como China, Rusia, Irán y Corea del Norte.

Olivier Faure, el líder del Partido Socialista, tuiteó: “El país de los derechos del hombre y de los ciudadanos no puede alinearse con esas grandes democracias de China, Rusia e Irán”.

Olivier Marleix, del centro-derecha Les Républicains, agregó: “¿Cortar las redes sociales? ¿Como China, Irán, Corea del Norte? Incluso si es una provocación para distraer la atención, es de muy mal gusto”.

Fatima Ouassak, cofundadora del colectivo Front de Mères (Frente de la Madre) que representa a los padres en los banlieues de clase trabajadora , dijo que el tema era una distracción.

“Es una táctica de distracción. En lugar de debatir el tema de la violencia policial… nos estamos desviando hacia la responsabilidad de las redes sociales y los padres”, dijo Ouassak a la televisión BFM. “Es secundario y sobre las autoridades eludiendo su responsabilidad”.

Una fuente de Elysée insistió en que Macron “en ningún momento dijo que contemplaba cortar la red en el sentido de un apagón general”. El presidente había dejado en claro que quería un debate “tranquilo y considerado” sobre el papel de las redes sociales en los recientes disturbios, dijo la fuente.

“El presidente cree que deberíamos estar reflexionando sobre el uso de las redes sociales y qué base puede haber para eventuales prohibiciones o medidas administrativas”.

Hablando después de una reunión ministerial el miércoles, el portavoz del gobierno, Olivier Véran, dijo que se establecería un comité de todos los partidos para analizar una modificación de una ley sobre seguridad cibernética que actualmente se está tramitando en el parlamento.

Véran dijo que el gobierno había hecho una “solicitud firme” a las plataformas de redes sociales para eliminar los materiales que alientan la violencia lo más rápido posible y eliminar el anonimato de quienes posiblemente infrinjan la ley.

“Un joven debe saber que no puede sentarse detrás de su pantalla y escribir, organizar o hacer lo que quiera. El anonimato en cuanto a ofensas no existe. Tienes que entender que esto puede tener consecuencias y las consecuencias pueden llevar al castigo”, dijo Véran.

Cuando se le preguntó si significaba suspender las redes sociales, Véran agregó: “Podría ser algo así como suspender una función, como la geolocalización”.

El gobierno ha luchado contra disturbios y saqueos desde que un oficial de policía disparó fatalmente a Nahel M, de 17 años, durante una parada de tráfico el 27 de junio, reavivando las acusaciones de racismo sistémico entre las fuerzas de seguridad de Francia.

Un oficial de policía de 38 años ha sido puesto oficialmente bajo investigación, el equivalente francés de ser acusado, por homicidio voluntario y está bajo custodia.

Mientras Francia reflexiona sobre cómo evitar más turbulencia social en medio de acusaciones de racismo sistémico en la policía y en la sociedad en general, uno de los políticos de derecha más importantes del país fue acusado de “craso racismo” al afirmar que quienes participaron en los disturbios habían sufrido “una regresión a sus raíces étnicas”.

Desestimando el informe del ministro del Interior Gérald Darmanin a la Assemblée Nationale de que el 90% de los arrestados eran franceses, Bruno Retailleau, que encabeza el partido de derecha Les Républicains en el Sénat, dijo que esa no era “su identidad”.

“Desafortunadamente, para la segunda y tercera generación [de inmigrantes], hay una especie de regresión hacia sus raíces étnicas”, dijo a FranceInfo.

Posteriormente, Mathilde Panot, líder parlamentaria de la extrema izquierda La France Insoumise (LFI – France Unbowed) denunció el comentario como “craso racismo”. Otra diputada de LFI, Clémentine Autain, agregó: “estas personas, que rezuman racismo, se atreven a dar lecciones sobre el buen comportamiento republicano”.

Mientras la violencia parecía estar disminuyendo, con 17 arrestos durante la noche del martes, siete en París, el ministro de Transporte, Clément Beaune, anunció que los servicios de transporte público, detenidos a las 9 p.m. para persuadir a las personas a quedarse en casa, volverían a la normalidad el miércoles. En la región de Île-de-France, los daños en autobuses y tranvías, varios de los cuales fueron incendiados, se estiman en unos 20 millones de euros.

La fiscalía francesa abrió una investigación sobre la muerte de un hombre de 27 años que fue alcanzado por un proyectil durante los disturbios y saqueos en Marsella el sábado . Se cree que el hombre murió a causa de un golpe violento en el pecho de una “bola de destello” utilizada por la policía antidisturbios que provocó un paro cardíaco.

Los fiscales dijeron que no era posible determinar dónde estaba el hombre cuando fue golpeado o si había participado en los disturbios.

Las pistolas de bolas de destello están diseñadas para ser armas de control de disturbios no letales que no penetran la piel. Se cuestiona su uso por parte de la policía en Francia, ya que los proyectiles han provocado la pérdida de ojos, lesiones en la cabeza y otros traumatismos.

El comisario de Justicia de la UE, Didier Reynders, dijo el miércoles que la violencia en Francia, por parte de algunos policías y manifestantes “plantea un problema”, en declaraciones a la radio belga.

“Es sorprendente” que se haya visto un “nivel muy alto de violencia” en las protestas en Francia en los últimos años por el costo de vida, la reforma de las pensiones y el asesinato policial de un conductor adolescente la semana pasada, dijo a la radio pública belga RTBF.

Reynders dijo que el problema era con “un cierto número de policías… [y] el comportamiento de las personas que tienen derecho a protestar libremente, ese es un derecho fundamental, pero no a saquear tiendas, a destruir tiendas, a no destruir equipos públicos”. .