Más de 200 países avalan un nuevo fondo climático
Con este fondo, financiado principalmente por países desarrollados, y que más han contribuido a la crisis climática, cientos de países podrán mitigar los efectos nocivos y reducir la generación de gases de efecto invernadero.
Que Estados Unidos no bloqueara, como en años anteriores, este acuerdo representa un giro de 180 grados. Washington se resistió por décadas a este acuerdo al que muchas naciones en desarrollo, principalmente de Asia, África, América Latina y el Caribe, impulsaron, pues consideran que su aportación a la crisis actual del planeta fue mucho menor a la de otros países de mayor ingreso.
Como el principal generador de gases de efecto invernadero hasta hace poco, Estados Unidos consideraba que este tipo de acuerdos representaría una carga financiera al que un centenar de países tendrían derecho.
Sin embargo, las presiones de parte de la Unión Europea en la COP27, que se celebró en Egipto, fueron suficientes para acompañar los agravios de naciones en desarrollo y convencer a la delegación estadounidense de apoyar el histórico fondo.
El documento final que le da vida al fondo plantea que naciones emergentes como China y Araba Saudí aporten recursos en vez de recibirlos, pese a no ser catalogados enteramente como países desarrollados. La (ONU) considera a China como un país en desarrollo, por lo que esta postura podría generar tensiones diplomáticas en el futuro.
Beijing sostiene como uno de sus pilares en las negociaciones climáticas ser considerada como una nación en desarrollo.
El avance, no obstante, es significativo, especialmente dado que el calentamiento del planeta ya es de 1.1 grados, a nada de los 1.5 grados considerados como un límite casi catastrófico.