México acelera más de un 200% la detención de migrantes
Las capturas de personas extranjeras sin documentación alcanza, durante los cinco primeros meses del año, máximos históricos en el sexenio de López Obrador
El País.- México ha acelerado el ritmo de detención de migrantes. En los primeros cinco meses de 2024 ya son tres veces más que durante el mismo periodo del año anterior, según el último boletín que ha publicado el Instituto Nacional de Migración (INM). La subida es más del 200%. Si la cifra de capturas se mantiene durante junio y julio (se publican los datos con dos meses de retraso), en solo siete meses se superarán los arrestos de todo el año anterior, que ya fue un récord histórico. Los datos contrastan con la retórica del presidente, Andrés Manuel López Obrador, que hace un mes afirmó en una conferencia matutina que México trataba a los migrantes “muy bien”, a pesar de que la ONU ha dejado claro que la detención de migrantes solo debe usarse como “último recurso”. En abril, el Gobierno de Estados Unidos publicó un comunicado en el que afirmaban que el presidente mexicano y Joe Biden habían llegado a un acuerdo para “reducir significativamente los cruces fronterizos irregulares”.
Las autoridades del Instituto Nacional de Migración (INM) de México han cuantificado entre enero y mayo de este año 590.401 “eventos de personas en situación migratoria irregular”, un eufemismo que el organismo usa para referirse a las detenciones. Casi 4.000 personas al día han sido procesadas por no tener documentación. En solo cinco meses la cifra de capturas se aproxima a las 782.176 que hubo durante todo el 2023.
El año pasado, un grupo de expertos de la ONU denunció que en México la detención arbitraria era “un problema generalizado” que daba pie a “malos tratos, torturas, desapariciones forzadas y ejecuciones arbitrarias”. El Ejecutivo mexicano respondió que el informe no reflejaba “adecuadamente” el contexto actual: “La política de seguridad del Gobierno de México tiene un nuevo enfoque que busca atacar las causas estructurales de la desigualdad y reconoce los desafíos en la materia; no se coincide en la apreciación del grupo de trabajo”
La secretaria de Relaciones Exteriores mexicana, Alicia Bárcena, afirmó el pasado 26 de junio que México tenía una “visión progresista” de la migración y que desde el Ejecutivo se había “puesto en marcha un modelo mexicano de movilidad humana”. Sin embargo, la entrega de visas por razones humanitarias, que permiten a migrantes que buscan asilo en México conseguir un permiso de trabajo y transitar por el país de forma segura, descendieron drásticamente. Entre enero y mayo de este año se emitieron 1.243 documentos de este tipo, mientras que en el mismo periodo del año anterior fueron 68.284.
Seguir los pasos de Estados Unidos
La migración se ha vuelto un tema clave de la campaña electoral estadounidense en la que se enfrentan el actual presidente demócrata, Joe Biden, y su predecesor, el republicano Donald Trump. El mandatario sabe que un cruce masivo de migrantes puede castigarle en las urnas. Por ello el Gobierno mexicano y el estadounidense han mantenido múltiples reuniones para abordar el tema de la migración. El pasado abril, la Casa Blanca emitió un comunicado en el que confirmaba que López Obrador y Biden habían tenido un encuentro para “reducir significativamente los cruces fronterizos irregulares”.
La subida de las detenciones en México un 219% contrasta con la ligera bajada de las mismas cifras en la frontera sur de Estados Unidos. En el límite entre los dos países, la patrulla fronteriza estadounidense ha tenido 905.936 “encuentros” (otro eufemismo para referirse a las detenciones) con migrantes en los primeros cinco meses del año, una cifra un 3% menor a las capturas en el mismo periodo de 2023.
Junto a las reuniones con el Gobierno mexicano para que menos migrantes lleguen al límite entre ambos países, el demócrata firmó en junio una orden ejecutiva para cerrar la frontera con México tras superar los 2.500 cruces irregulares al día. López Obrador declaró que la medida era electoralista: “Que se atiendan las causas, que ya no se esté pensando ni en muros, ni en militarizar la frontera, ni en cerrar la frontera”. En México, sin embargo, el paso se ha cerrado con un número de detenciones de migrantes que apunta a récord histórico.