Aunque el país es uno de los más afectados de América Latina por desastres naturales, no prioriza en su agenda entregar más recursos a la protección del medio ambiente.
Expansión.- México es uno de los países con más peligro de enfrentar desastres naturales asociados al cambio climático y este riesgo no es cosa del futuro. Las afectaciones por estos fenómenos ya se registran en distintas zonas del país y en las últimas décadas han impactado, aproximadamente, a 12.3 millones de personas.
Pese a la urgencia de priorizar recursos para la protección del medio ambiente y el combate al cambio climático, el gobierno proyecta recortar 11.4% al presupuesto del sector en 2024.
“No es una asignación de recursos que sea, digamos, acorde a la emergencia climática que te va demandando progresivamente más recursos para poder enfrentar la emergencia”, explica Carlos Asunzolo Morales, gerente de investigación y política pública en el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda).
El impacto de los desastres naturales
Entre el año 2000 y 2022, alrededor de 6.2 millones de personas resultaron afectadas en México por el paso de distintas tormentas. Es el segundo país de América Latina y El Caribe, solo por debajo de Cuba, con mayores daños por este fenómeno natural.
Además, México ocupa el quinto lugar de la región con uno de los riesgos más altos de exposición física a ciclones tropicales. También está en el puesto cinco de las naciones con más población impactada por sequías, con 2.5 millones de personas afectadas.
Paradójicamente, el país registra serios daños por inundaciones y, al menos, 3.6 millones de mexicanos han padecido este desastre natural en las últimas dos décadas.
Todos los datos anteriores se han estimado en el informe Panorama de los Desastres en América Latina y El Caribe 2000-2022, publicado en junio de 2023 por la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, por sus siglas en inglés) y por la Oficina de Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres.
Como demuestra este reporte, México es uno de los países con más riesgo de enfrentar desastres naturales asociados al cambio climático y las consecuencias de estos ya se viven en distintas regiones del país, con alrededor de 12.3 millones de personas afectadas de 2000 a 2022.
A decir de Asunzolo Morales, esto es consecuencia de la carencia de una política preventiva y de un fondo de recursos que permita reaccionar frente a desastres ambientales provocados por el cambio climático.
“Por un lado México es uno de los principales emisores de gases de efecto invernadero. A nivel global se encuentra entre los 10 primeros lugares y a nivel Latinoamérica es solamente el segundo por detrás de Brasil, en términos de emisiones, por ejemplo, de metano. Pero, al mismo tiempo, es un país que se encuentra en una posición de vulnerabilidad alta frente al fenómeno climático”, expone.
Para “salvar vidas y reducir pérdidas económicas” asociadas a los desastres naturales, la ONU ha exhortado a los gobiernos a realizar inversiones públicas y privadas que atiendan esta problemática.
Sin embargo, en el caso de México, el gobierno federal no ha puesto la protección del medio ambiente como una prioridad de su agenda política y económica.
La falta de atención a estos problemas aumentan la posibilidad de mayores daños por desastres naturales y las personas más vulnerables son las más afectadas, advirtió en un comunicado Shelley Cheatham, jefa de la Oficina Regional de OCHA para América Latina y El Caribe.
“En América Latina y el Caribe, los eventos climáticos y sísmicos extremos están ocurriendo en lugares donde la pobreza, la desigualdad, la inseguridad alimentaria, el desplazamiento y la violencia son parte de la vida diaria de millones de personas”, declaró.