Netanyahu vuelve a protestar por los rehenes en Gaza tras arrestos relacionados con una supuesta filtración

El tribunal afirma que los arrestos siguieron a una investigación sobre una presunta violación de la seguridad nacional que había “perjudicado los objetivos de guerra israelíes”

The Guardian.- Netanyahu vuelve a protestar por los rehenes en Gaza tras arrestos relacionados con una supuesta filtración

El tribunal afirma que los arrestos siguieron a una investigación sobre una presunta violación de la seguridad nacional que había “perjudicado los objetivos de guerra israelíes”

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu , está en el centro de una nueva tormenta política relacionada con un acuerdo de rehenes en la guerra de Gaza después del arresto de varias personas en relación con una supuesta filtración de documentos clasificados de su oficina.

Un tribunal israelí anunció los arrestos el viernes por la tarde, antes del comienzo de Shabat, diciendo que una investigación conjunta de la policía, los servicios de seguridad interna y el ejército sospechaba una “violación de la seguridad nacional causada por el suministro ilegal de información clasificada”, que también había “perjudicado el logro de los objetivos de guerra de Israel”.

Se cree que uno de los arrestados es el portavoz del primer ministro.

Aunque la mayoría de los detalles aún están sujetos a una orden de secreto parcial, los medios israelíes han informado de que el objetivo de la guerra en cuestión es la liberación de los 101 rehenes israelíes que todavía se encuentran en poder de Hamás. Se alega que los sospechosos filtraron selectivamente documentos de estrategia de Hamás encontrados por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en Gaza y manipularon o editaron el material para que pareciera que el grupo militante palestino buscaba contrabandear rehenes a Egipto y luego a Irán o Yemen.

En septiembre, Netanyahu hizo esta afirmación en entrevistas y conferencias de prensa en apoyo de una nueva exigencia que había formulado en las negociaciones para un acuerdo de alto el fuego y liberación de rehenes: la necesidad de que las tropas israelíes permanecieran en la frontera entre Gaza y Egipto. La exigencia fue rechazada por Hamás con el argumento de que no formaba parte de los términos que ambas partes ya habían aceptado condicionalmente, y fue una de las principales razones del fracaso de meses de negociaciones.

Netanyahu ha sido acusado en repetidas ocasiones de demorar un acuerdo para evitar el colapso de su gobierno de coalición. Cualquier cosa que no sea una victoria total sobre Hamás es un anatema para sus aliados de extrema derecha, y se cree que Netanyahu considera que permanecer en el cargo es la mejor manera de evitar ser procesado por casos de fraude, soborno y abuso de confianza presentados en 2019. Niega haber cometido alguna irregularidad.

Poco después de que el líder israelí mencionara por primera vez el supuesto plan de Hamás, aparecieron en el medio británico The Jewish Chronicle y en el tabloide alemán Bild informes aparentemente basados ​​en el mismo material manipulado, que fueron ampliamente recogidos por los medios israelíes.

Preocupado por la posibilidad de que la publicación de los artículos pusiera en peligro los esfuerzos de recopilación de información en Gaza, el ejército israelí inició una investigación sobre la filtración y anunció que “no tenía conocimiento de la existencia de ningún documento de ese tipo”. El Jewish Chronicle se retractó más tarde de la historia y despidió al periodista que la escribió.

El despacho del primer ministro dijo el viernes que nadie que trabajara para Netanyahu había sido interrogado o detenido, pero el sábado no negó que la filtración pudiera haberse originado en su despacho. Decenas de otras filtraciones relacionadas con el alto el fuego y las negociaciones para la liberación de rehenes han aparecido en informes de los medios, señaló, sin que se hayan iniciado investigaciones.

Los cargos estarían relacionados con la filtración de documentos clasificados, negligencia en el manejo del material y su uso para influir en la opinión pública, así como la contratación indebida de un asesor sin la autorización de seguridad adecuada.

La noticia de los arrestos ha sido recibida con furia por los detractores del primer ministro en un país profundamente dividido políticamente. El sábado por la noche, miles de personas en todo Israel participaron en lo que ahora son manifestaciones semanales a favor de un acuerdo.

El líder de la oposición, Yair Lapid, escribió en X: “Tenemos duros enemigos en el exterior, pero el peligro que viene desde dentro y desde los centros de toma de decisiones más sensibles sacude los cimientos de la confianza de los ciudadanos de Israel en el desarrollo de la guerra y en el manejo de los asuntos de seguridad más sensibles y explosivos”.