Elon Musk, el anti telemático
Por otra parte, además del despido, Elon Musk trabaja en otra política: potenciar la presencialidad laboral y prescindir por completo del teletrabajo, método que se masificó producto del covid-19. Sin embargo, en el contexto de una era de vacunas y alta prevención, para el magnate ir a la oficina es importante.
De hecho, Musk nunca fue partidario del teletrabajo. Por ejemplo, en Tesla exigió un mínimo de 40 horas semanales en la oficina. Quien cumple con la cifra sí tiene derecho al beneficio de trabajar desde casa. “Si no apareces, asumiremos que has dimitido”, dijo alguna vez.
Twitter atraviesa por una fuerte crisis económica y es el motivo de estas radicales políticas de Elon Musk. Grandes empresas como General Motors y L’Oreal anunciaron la suspensión de su publicidad en la red social. Por lo tanto, otra de las misiones de Musk, además de la productividad y el bolsillo, será sostener la plataforma que acaba de comprar por 44 mil millones de dólares.