Aristegui.-
La noche del miércoles, cuando apenas habían transcurrido unas cuantas horas del anuncio de libertad del presunto agresor de María Elena Ríos, el ex diputado priista, Juan Antonio Vera Carrizal; una jueza del circuito de la mixteca de Oaxaca ordenó a través de un escrito que su libertad quedó sin efecto, por lo que seguirá en prisión.
En dicho documento enviado al director del Centro Penitenciario de Tanivet, la jueza María Antonia Esteva Domínguez señala que tanto Vera Carrizal, como Ruvicel Hernández Ríos y Rubén Loaeza Charrez, probables responsables del feminicidio en grado de tentativa, continuarán con la medida cautelar originalmente impuesta, es decir, prisión preventiva justificada.
Y es qué, desde el mediodía de este miércoles, cuando se supo que el juez José Gabriel Ramírez Montaño absolvió de toda culpa y responsabilidad a Juan Antonio Vera Carrizal, la indignación y la rabia desataron las redes sociales, desde funcionarios de alto nivel, colectivas, defensoras, y ciudadanas y ciudadanos lamentaron de la decisión tomada.
Al respecto, la titular del Poder Judicial del Estado, la magistrada Berenice Ramírez Jiménez también mostró su desacuerdo con el fallo dado por el juez en materia penal del Tribunal de Enjuiciamiento del Circuito Judicial de la Mixteca y dijo que su actuar “Deja desprotegida a una víctima de violencia y da muestra de inconsistencias evidentes e insostenibles”.
Además, ordenó a la Visitaduría General de la institución la apertura de una investigación al juez, para fincar responsabilidades administrativas y penales en contra, por posibles actos de corrupción en el desempeño de sus funciones y conductas ilícitas.
“No estoy de acuerdo con el fallo, soy una mujer institucional que respeta la autonomía judicial; sin embargo, se investigará a fondo la conducta dudosa de los involucrados y se les castigará con todo el peso de la ley caiga quien caiga”, dijo la Magistrada Presidenta.
Asimismo, el Fiscal General del Estado de Oaxaca, Bernardo Rodríguez Alamilla condenó la libertad otorgada por el juez, y anunció la impugnación de esa determinación, al realizar todas las acciones jurídicas para contravenir esa determinación.
El próximo 9 de septiembre, se cumplirán cinco años de la agresión con ácido a la que sobrevivió María Elena Ríos, que le dejó el 80 porciento de su rostro y cuerpo con cicatrices.
Desde ese entonces, la palabra “justicia” ha sido la más pronunciada por la joven de 30 años, que por todos los medios ha buscado lograr, hasta este día.
