Sheinbaum y Gálvez: fortalezas y retos de los equipos de campaña frente al 2024

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Las precandidatas presidenciales Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez ya tienen listo a los equipos que las acompañará a crear su programa de gobierno y estrategia en la contienda por la Presidencia.
Expansión.- En la carrera por la Presidencia de la República en las elecciones del 2024 , Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez no irán solas. Su aspiración y estrategia estará respaldada por los equipos con los que apoyarán sus estrategias, crearán redes y programas de gobierno que les ayuden a conquistar votantes.

Los equipos de ambas candidatas incluyen a hombres y mujeres funcionarios partidistas, exadversarios por la candidatura, exfuncionarios de gobiernos, académicos y otros políticos —unos más experimentados que otros— con los que caminarán rumbo al 2 de junio.

La precandidata de la coalición “Sigamos haciendo historia”, Claudia Sheinbaum fue la primera en presentar a los dos equipos que, dijo, la acompañarán hasta la Presidencia de la República: el de precampaña y otro que se encargará de diseñar el proyecto de nación 2024-2030.

Gustavo López Montiel, profesor de Ciencia Política en la Escuela de Ciencias Sociales y Gobierno del Tecnológico de Monterrey Ciudad de México, explica si bien cada equipo tiene un propósito, en busca de la victoria el más relevante es aquel que se integra por operadores políticos.

“Un equipo busca generar impacto en términos de la relevancia de las personas que los integran, aun cuando esas personas a veces ni participan en la elaboración de los documentos, sino más bien es prestar su nombre o su imagen para apoyar a un candidato o candidata. En realidad, los equipos de campaña que funcionan son los que llevan la operación misma, esos son los equipos efectivos, porque son de operadores políticos, de figuras partidarias y lo que hacen es articular las diversas alianzas que la campaña requiere”, explica.

El pasado domingo, presentó al equipo encargado de coordinar los foros en los que se establecerán diálogos para enriquecer del proyecto de nación.

Efrén Arellano, profesor de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, señala que este equipo busca mostrar pluralidad y tiene como propósito articular con varios sectores de la sociedad civil.

“El segundo equipo tiene la intención de articular con la sociedad civil, y de ahí, nutrir su programa, su plan de gobierno”, refiere.

Desde hace semanas, la precandidata de “Fuerza y Corazón por México” fue integrando algunos perfiles a su campaña, pero fue hasta este martes cuando delineó a los hombres y mujeres que la acompañarán en busca de la cuarta alternancia para el país.

En la presentación Gálvez les pidió trabajar bajo la siguiente filosofía:”Si algo está bien, se queda, como son los programas sociales; si algo puede mejorar, lo mejoramos como es la economía; si algo está mal, lo vamos a arreglar, como es la salud y la inseguridad”.

Fortalezas y debilidades

En el caso de Claudia Sheinbaum, los expertos advierten que su primer equipo goza de experiencia al contar con la incorporación de los dos excoordinadores de las últimas dos campañas presidenciales del hoy presidente Andrés Manuel López Obrador: Ricardo Monreal y Tatiana Clouthier.

En lo interno, es un mensaje de unidad debido a que integró a sus exadversarios por la contienda como a Adán Augusto López, Gerardo Fernández Noroña o Jesús Peña, cercano a Marcelo Ebrard.

En la coordinación de la precampaña está el líder de partido, Mario Delgado, quien desde que llegó a la presidencia en 2020, se han ganado 15 entidades.

El segundo equipo busca afianzar la confianza de morenistas pero también enviar el mensaje de que será plural y moderado.

“De lo que trata es de enviar un mensaje de pluralidad, de moderación. También lo hizo López Obrador cuando presentó a sus equipos, incluso a su propio gabinete tuvo grupos de personas moderadas. El mensaje que se busca enviar es que se integren la mayor parte de los grupos que pueden tener cierto recelo, por ejemplo, empresarios, que puedan ver con recelo a la candidata, vean la afinidad en algunos de los nombres y asuman, que esos nombres nunca harían cosas descabelladas. Con López Obrador a vimos a Alfonso Romo”, explica Gustavo López Montiel.

Otro de los positivos que advierten es que en ese grupo de trabajo es que se incluyó a algunos críticos de López Obrador como la lingüista Violeta Vázquez y al economista Gerardo Esquivel, a políticos de oposición como Javier Corral, expanista y exgobernador de Chihuahua, y a perfiles académicos y científicos como Juan Ramón de la Fuente, exrector de la UNAM, y Jorge Marcial Islas, del Instituto de Energías Renovables.

También se incluyen a personajes cercanos a Claudia Sheinbaum como Rosaura Ruiz, quien fue secretaria de Educación ,Ciencia y Tecnología de la Ciudad de México.

Una de las debilidades que muestra el equipo de Sheinbaum es que no necesariamente esas personas la acompañarán en el ejercicio de su posible gobierno, es decir, en la ejecución del proyecto que hoy tendrán a cargo para elaborar.

“Los equipos de campaña no siempre son los equipos de gobierno. A los equipos les ofrecen muchas cosas, pero cuando se llega al gobierno no se cumple lo que se prometió. Lo vemos en todas las campañas de todos los gobiernos”, sostiene el académico del Tec de Monterrey.

En el caso de Xóchitl Gálvez, los politólogos consideran que el principal positivo es la pluralidad y experiencia de quienes lo integran, entre ellos, Santiago Creel, coordinador general de campaña; Margarita Zavala, en la coordinación con la sociedad civil e Ildefonso Guajardo, en relaciones exteriores.

Este equipo muestra expertise, un conocimiento de las tareas que les han dado pero a la vez una clara definición partidista, principalmente vinculados al PRI, PAN y PRD, pero esta pluralidad partidista, no es equivalente a una pluralidad social” – Efrén Arellano, catedrático de la UNAM.

Una de las debilidades que identifican en el equipo de Gálvez es la imagen de políticos tradicionales como Rubén Moreira quien fue nombrado coordinador territorial nacional de la campaña; Jesús Ortega Martínez, al frente del Comité de Prospectiva o Maximiliano Cortázar, coordinador de Comunicación Social de la Campaña.

En esa pluralidad, consideran, Xóchitl Gálvez deberá esquivar posibles diferencias y abogar por la conciliación, pues ella está siendo postulada por partidos de diferentes posturas ideológicas.

“Es una situación complicada porque implica resolver contradicciones en términos de posición política de los grupos del PRI, los del PAN, tiene que plantear una posición un poco más moderada o más de centro hacia la izquierda por el PRD y eso pues obviamente es complicado en términos de la configuración de las alianzas”, agrega López Montiel.

Este miércoles presentó al equipo que se encargará de realizar los eventos para dialogar con la ciudadanía sobre “la posibilidad de construir un mejor país”. El equipo se conforma de 20 coordinadores, cada uno encargado de un tema. La lista está integrada por legisladores, exgobernadores, un exsecretario de Hacienda, extitulares de Cultura, especialistas, así como representantes de pueblos indígenas.

“War Room”: el equipo oculto

Hay otro equipo más, el cual no suele ser público, sin embargo, es vital para enfrentar cualquier crisis y, por su puesto, ganar cualquier contienda: el llamado war room.

Ese equipo suele estar integrado por estrategas, consultores y analistas, quienes son los encargados de coordinar y ejecutar la estrategia de la campaña, defender al candidato de los ataques, evaluar el crecimiento, y ajustar todo lo que no está funcionando.

Hay personas que operan la campaña que no son presentadas, pero que de acuerdo con Gustavo López Montiel, son las que llevan la estrategia en los ‘cuartos de guerra’.

“Es donde están personas que tienen que ver con la operación política, con la estructura electoral, la propaganda, estudios, encuestas, los discursos, la programación y logística de eventos. Son los equipos que operan la campaña”, expresa el experto, quien señala que son los que realmente hacen todo el trabajo.

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