El presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado, José Luis Fernández Martínez, informó que tras una auditoría a la Auditoría Superior del Estado, se encontró que solamente el 40 por ciento de los trabajadores está dedicado a las labores de fiscalización.
El 60 por ciento restante se encuentra en áreas que nada tienen que ver con la función de fiscalización, “lo que genera muchas dudas con respecto a su funcionamiento y ahora que ya no existe el convenio con la Auditoría Superior de la Federación, la carga de trabajo se reducirá a la mitad”.
Dijo que por esta situación se va a generar que haya una reestructuración administrativa, aprovechando el momento de la transición que se vive con la renuncia de la anterior titular y lograr que se dediquen más recursos a la fiscalización, que fue lo que dio origen a la creación de la institución.