Tras la irrupción de civiles armados en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, y el enfrentamiento de policías con civiles armados en Texcaltitlán, Estado de México, que dejó un saldo de una decena de fallecidos, el presidente Andrés Manuel López Obrador insistió en que se mantendrá la misma estrategia de seguridad en el país.
En la conferencia mañanera de Palacio Nacional, el mandatario reiteró que el objetivo de su administración es atender las causas que originan la violencia tanto con programas sociales como dando seguimiento al tema a diario desde el gabinete de seguridad.
“Tenemos que continuar con la misma estrategia porque no se puede enfrentar la violencia con la violencia, esto es polémico”, puntualizó.
López Obrador aseguró que en los gobiernos anteriores no se trabajaba de manera coordinada entre las fuerzas federales de seguridad y tampoco había comunicación con las autoridades estatales.
Además, afirmó que ahora hay más elementos que trabajan con profesionalismo e inteligencia y sin contubernio con el crimen, tal como ocurría con el ex secretario de seguridad, Genaro García Luna.
“Todo eso se está haciendo, pero lo más importante de todo es atender las causas, procurar que tengamos una sociedad mejor, que los jóvenes sean atendidos, que no se les margine, que tengan derecho al trabajo a la educación, que se combata la pobreza, que se evite la desintegración de las familias, que se fortalezcan los valores que existen en las familias, en los pueblos, valores culturales, morales, espirituales, que no se continúe impulsando un estilo de vida materialista que se considere como fundamental el dinero”, agregó.
El Presidente mencionó que si se hubiera continuado con la corrupción y el saqueo el país estaría “ingobernable”. Sin embargo, reconoció que no se pueden lograr resultados de la noche a la mañana “estamos trabajando, pero tengo mucha fe que vamos a seguir trabajando”.