Una jueza de Oaxaca revoca la decisión de dejar en libertad al presunto autor intelectual de la agresión con ácido a María Elena Ríos

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La saxofonista se ha mostrado satisfecha con la nueva resolución, que obliga a los imputados, acusados de feminicidio en grado de tentativa, a permanecer en prisión: “Me llena de esperanza, me da un rayo de luz”

El País.- Apenas unas horas después de que el juez José Gabriel Montaño, adscrito al Tribunal Superior de Justicia de Oaxaca, absolviera y dejara en libertad al presunto autor intelectual de la agresión con ácido a la saxofonista María Elena Ríos, otra jueza del Estado, jerárquicamente superior, ha revocado la decisión y ha ordenado la permanencia o reingreso en prisión del exdiputado Juan Antonio Vera Carrizal y los otros dos implicados en el caso, Ruvicel Hernández Ríos y Rubén Loaeza Chárrez.

“Queda sin efecto boleta de libertad que fue ordenada a favor de los imputados antes mencionados y se ordena permita el ingreso de los mismos para que continúen con la medida cautelar originariamente impuesta en esta causa penal”, se lee en un documento dirigido al director del Centro Penitenciario Varonil de Tranivet, en Oaxaca, y difundido este miércoles por la noche. Así, el escrito del Tribunal de Enjuiciamiento del Circuito Judicial de la Mixteca anula “lo celebrado en audiencia de juicio oral”, y ordena “permitir el ingreso de los mismos al Centro de Internamiento” en caso de que ya estén en libertad, o “continuar con la medida cautelar” en caso de que todavía no lo hayan abandonado. Hasta el momento se desconoce si los acusados han sido puestos en libertad durante el día o todavía permanecen en el centro penitenciario.

Orden de medida cautelar a Juan Antonio Vera Carrizal, acusado de feminicidio en grado de tentativa por el ataque con ácido a María Elena Ríos.

Elena Ríos, que no se había pronunciado sobre esta nueva decisión judicial hasta este jueves por la tarde, se ha mostrado satisfecha con la resolución de la jueza, que contradice lo dispuesto por el otro magistrado. “Me llena de esperanza, me da un rayo de luz, no solamente a mí, sino a todas las mujeres, las infancias, las víctimas que no nos hemos sabido quedar calladas y que, por supuesto, no van a contar con la comodidad de nuestro silencio”, ha expresado en un vídeo que ha subido a su cuenta oficial de la red X. También ha tenido palabras para el juez José Gabriel Montaño, que había resuelto absolver de todos los cargos a los tres imputados porque consideraba que las pruebas aportadas no habían logrado “destruir” su “presunción de inocencia”. “No se trata de una prueba o dos que no pude acreditar”, le ha reprochado Ríos, “son más de 20 que acreditamos y que José Gabriel desestimó”. “Ahora sí será castigado [Vega Carrizal] con todo el peso de la ley, y será el vivo ejemplo de que un feminicida no debe tocar a una mujer”, ha añadido, y ha pedido que se le retire la cédula profesional al juez para que no pueda volver a ejercer: “Es una persona corrupta, evidentemente se trataba de un pacto”.

El exdiputado oaxaqueño Vera Carrizal fue imputado en 2020, por ordenar supuestamente el ataque con ácido contra María Elena Ríos, su expareja sentimental, a la que dos hombres le vertieron una cubeta con el líquido en septiembre de 2019, en Huajapan de León, donde residía. La Fiscalía de Oaxaca identificó a cinco hombres implicados en el intento de feminicidio de la saxofonista, entre los que se encuentran Vera Carrizal y su hijo, Juan Antonio Vera Hernández, prófugo de la Justicia hasta la fecha. El proceso contra el exdiputado priista estuvo plagado de irregularidades desde del principio y marcado por una amplia temeridad procesal por parte de la defensa del acusado.

Vera Carrizal, un poderoso empresario oaxaqueño con importantes contactos en la política, se amparó para evitar ser detenido desde el ataque. En 2020, y después de una intensa presión mediática que llegó hasta el gobernador del Estado, se entregó voluntariamente en la Fiscalía local. Fue vinculado a proceso y un juez decretó prisión preventiva justificada en su contra.

En México más del 95% de los delitos contra las mujeres nunca se resuelve y solo una pequeña parte llega a los tribunales. De esos, menos de un 3% recibe una sentencia condenatoria. En declaraciones a este diario, la joven oaxaqueña aseguraba tener mucho miedo de lo que pueda sucederle a ella y a su familia después de la decisión del primer juez. “Esto es Oaxaca, esto es México, esta es la impunidad que viven las mujeres que luchamos por la justicia”, ha dicho la saxofonista.

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