El SAT actualizó en 2025 su lista de palabras prohibidas en transferencias; usarlas podría activar auditorías o sanciones.
ABC.- Aunque muchas personas no lo saben, las descripciones que se colocan en las transferencias bancarias pueden generar problemas con el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
En 2025, la autoridad fiscal reforzó su vigilancia y actualizó su lista de palabras consideradas “sensibles” o “sospechosas”, que nunca deberías escribir, ni siquiera como broma.
Este tipo de detalles, aparentemente insignificantes, forman parte de las estrategias del SAT para identificar movimientos irregulares, prevenir delitos financieros y detectar incongruencias entre ingresos reportados y operaciones bancarias.
¿Por qué el SAT revisa lo que escribes en tus transferencias?
Desde hace varios años, el SAT analiza los conceptos de pago en transferencias electrónicas.
Esto le permite detectar actividades como fraude fiscal, lavado de dinero, operaciones con recursos de procedencia ilícita o evasión de impuestos.
Las plataformas bancarias cuentan con mecanismos que pueden activar alertas automáticas si detectan ciertas palabras clave en la descripción de una operación.
Lista de palabras que NUNCA debes usar en 2025
La nueva lista del SAT incluye términos que, aunque parezcan inofensivos o se usen como chiste, podrían causarte una auditoría. Estas son algunas:
- Droga
- Fraude
- Apuesta
- Armas
- Secuestro
- Asesinato
- Robo
- Lavado de dinero
- Soborno
- Expresiones sexuales
Incluir cualquiera de estos conceptos puede derivar en una revisión exhaustiva de tu cuenta, solicitud de comprobantes o incluso sanciones si no puedes justificar el origen del dinero.
¿Qué descripciones sí puedes usar sin problemas?
Para evitar revisiones innecesarias, el SAT recomienda usar conceptos claros, serios y relacionados directamente con el motivo de la transferencia. Ejemplos recomendados:
- Pago de renta
- Compra de insumos
- Reembolso de gastos
- Honorarios por servicios profesionales
- Pago de nómina o servicios
Además, evita apodos o sobrenombres. Es preferible usar nombres completos o razones sociales. También es útil agregar números de factura, referencias o conceptos fiscales si los tienes.
Lo que escribes puede protegerte o meterte en problemas
Aunque parezca exagerado, cuidar los conceptos en tus transferencias bancarias es una medida inteligente.
Si realizas operaciones frecuentes o por montos elevados, lo mejor es asesorarte con un contador. Guarda comprobantes, respalda tus movimientos y evita palabras prohibidas.
En 2025, la vigilancia fiscal es más estricta que nunca. No le des al SAT motivos para investigarte por un simple error de redacción.
