La Patrulla Fronteriza informó que se trató de la mayor incautación realizada en un sólo operativo contra el tráfico de drogas en la frontera entre Texas y Coahuila
Infobae.- Las autoridades de Estados Unidos frenaron un cargamento de metanfetamina que pretendían cruzar por el puente fronterizo entre Piedras Negras, Coahuila, y Eagle Pass, Texas, valuado en más de 117 millones de dólares.
En un comunicado, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) informo que se trató de la mayor incautación realizada en una sola inspección en la garita; respecto al peso total del cargamento, se fijó en seis y media toneladas del narcótico.
De acuerdo con la información de las autoridades norteamericanas, el decomiso ocurrió el pasado 18 de febrero en el Puente Internacional Camino Real y se descubrió al inspeccionar un camión con remolque que documentó transportar una sustancia química.
Al tratarse de uno de los cruces fronterizos más utilizados para enviar drogas a Estados Unidos, los agentes del CBP enviaron al camión a una segunda inspección con perros entrenados para la búsqueda de narcóticos y otras sustancias ilícitas; fue ahí donde descubrieron que en realidad se trataba de 13 mil 101 libras de metanfetamina.
Tras el aseguramiento histórico, Mark Dawson, jefe de la Oficina de Investigaciones de Seguridad de Houston ofreció una conferencia de prensa para informar que el destino de la droga era supuestamente la capital de Texas, algo que “habría destruido un número incalculable de vidas”.
“Esta gigantesca incautación de metanfetamina, la más grande jamás detenida por oficiales de CBP en un puerto de entrada, ilustra de manera única la grave amenaza de narcóticos que nuestros oficiales enfrentan a diario”, indicó el Director de Operaciones de Campo de la Oficina de Laredo, Donald Kusser.
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Cárteles controlan Coahuila
Un día antes del comiso, el gobernador de Texas, Greg Abbot, viajó a la ciudad fronteriza de Eagle Pass para anunciar la construcción de una base de operaciones militares avanzadas y aprovechar para lanzarse contra la estrategia de seguridad de los tres niveles de gobierno mexicanos, misma que señaló de insuficientes.
“México no controla la frontera, lo hacen los cárteles; estos grupos operan de manera independiente y hacen lo que les viene en gana. si quieren cruzar, cruzan”: Greg Abbot”.
Las declaraciones del gobernador de Texas coinciden con la visión de Coahuila que plasmó es aspirante a la gubernatura Ricardo Mejía Berdeja, quien acusó al exmandatario Manuel Riquelme Solís de mantener el pacto político-criminal de los hermanos Ruben y Humberto Moreira; además recalcó que los carteles de la droga distribuían narcóticos bajo la protección de las policías municipales y estatales.
Según información difundida por la Agencia para el Control de Drogas (DEA), Tamaulipas es asediado por los cárteles de Sinaloa, del Noreste y Jalisco Nueva Generación, sin que ninguna haya logrado tener el control absoluto, por lo que la violencia generada por sus enfrentamientos para dominar la plaza se incrementaron en los últimos años.
Para Mejía Berdeja, es evidente que en la entidad aún se respira el miedo que el Los Zetas impusieron a los pobladores; para su rival político y actual gobernador, Manolo Jiménez, la estrategia de seguridad para “blindar” el estado funcionó e impidió que el Cártel del Noreste tomara el control.
Conviene recordar que Coahuila colinda con los estados de Nuevo León y Tamaulipas por el Este, donde los cárteles del Noreste y del Golfo tienen una batalla a muerte por el control de las rutas que conducen a Nuevo Laredo; mientras que al Oeste tienen como vecino a Chihuahua, estado bajo el control de “La Línea”, el remanente del Cártel de Juárez, que a su vez defiende el territorio de los embates del Cártel de Sinaloa. Estos cuatro estados tienen frontera con Texas, lo que hace que sean claves en las rutas para el trasiego de drogas.
